Los sindicatos presionan a Sánchez para que blinde por ley la subida anual del SMI

  • CCOO y UGT quieren cambiar el Estatuto de los Trabajadores para incluir en los criterios de actualización del SMI el baremo del 60% del salario medio.
Fotografía de Unai Sordo y Pepe Álvarez / EFE
Fotografía de Unai Sordo y Pepe Álvarez / EFE

El Salario Mínimo Interprofesional (SMI) está en boca de todos. Las hojas se caen del calendario y el Gobierno tiene apenas dos semanas para aprobar un Real Decreto que actualice su cuantía desde el 1 de enero de 2020. Con la investidura de Pedro Sánchez en el aire, y mientras la Abogacía del Estado dirime sobre si el Ejecutivo en funciones puede o no dar luz verde a esta medida, el PSOE y Unidas Podemos ya han acordado que esta será la primera decisión que tomará, de salir adelante, la coalición progresista. Mientras el Ministerio de Trabajo todavía no ha convocado a los agentes sociales para negociar esta cuestión, los sindicatos se han puesto manos a la obra y ya les han hecho llegar sus exigencias, que pasan por blindar por ley la subida anual del SMI.

Según ha podido confirmar La Información a través de fuentes oficiales tanto de CCOO como de UGT, los sindicatos más representativos del país  han trasladado a la ministra de Trabajo en funciones, Magdalena Valerio, una exigencia novedosa: quieren que se reforme el artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores para "asentar sobre nuevas bases la determinación anual del SMI", con el fin de que su cuantía garantice una "remuneración suficiente para satisfacer las necesidades de las personas trabajadoras y sus familias y les permita un nivel de vida digno". 

¿Cuáles son esas "nuevas bases" sobre las que habría de asentarse el cálculo del salario mínimo? Según las fuentes consultadas, se trataría de incluir entre los baremos a tener en cuenta la proporción del 60% del salario medio que establece como referencia óptima la Carta Social Europea y habilitar una revisión anual "automática" para que se mantenga ese porcentaje todos los años. Es decir, se trataría de una propuesta similar a la que pide blindar en la Constitución la revalorización de las pensiones con el IPC previsto, de manera que los pensionistas nunca pierdan poder adquisitivo con el cambio de año.

Actualmente, el artículo 27 del ET establece que el Gobierno debe fijar todos los años, previa consulta con las organizaciones sindicales y asociaciones empresariales, la cuantía del SMI del año siguiente, teniendo en cuenta la inflación, la productividad media, la participación del trabajo en la renta nacional y la coyuntura económica general. Se trataría, por tanto, de incluir en la fórmula un suelo que no permita que el salario mínimo legal quede nunca por debajo del sueldo medio, según las referencias estadísticas más actualizadas en el momento de la revisión.

¿Cuál es el SALARIO MEDIO?

La referencia del 60%

¿A cuánto asciende el salario medio en España? Según el decil de salarios del empleo principal que extrae el Instituto Nacional de Estadística (INE) de la Encuesta de Población Activa (EPA), el salario medio mensual bruto fue de 1.944,4 euros en 2018. En base a esta cifra, el PSOE y Unidas Podemos defienden que una remuneración mínima justa debería alcanzar los 1.200 euros (el 60% de 1.944,4 euros son 1.166,4 euros). Sin embargo, ese salario está calculado en base a 12 pagas, mientras el SMI se mide en 14 pagas. De ahí que el 60% deba calcularse sobre un sueldo medio de unos 1.666 euros, lo que implica que el SMI debería alcanzar los 999,6 euros.

Los sindicatos redoblan así la presión sobre los socialistas, que no cierran la puerta a valorar esta posibilidad. En el PSOE defienden su intención de seguir aumentando el SMI hasta acercarlo al 60% del salario medio al final de la legislatura. Y repiten ese objetivo como un mantra. Fuentes del Ministerio de Trabajo evitan pronunciarse sobre la cuestión concreta de modificar el Estatuto de los Trabajadores para incluir este criterio, si bien aseguran que abordarán el tema con CCOO y UGT. "Se tratará en la negociación con los sindicatos, que aún no se ha iniciado", avanzan.

En efecto, todavía no hay negociaciones oficiales. Lo que hay es una carta que las organizaciones sindicales han enviado a Valerio de manera conjunta en la que piden que suba el SMI desde los 900 euros actuales hasta los 1.000 euros en 2020, para acercarlo a ese umbral del 60% del salario medio. Se trata de una cantidad que están valorando los equipos negociadores del PSOE y Unidas Podemos de cara al diseño del programa del Gobierno de coalición y coincide también con el mínimo que firmaron la patronal y los sindicatos para los salarios en convenio en el IV Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC).

Enfado en la CEOE

Pero una cosa es lo que se acuerde en la negociación colectiva y otra es el SMI, cuya subida implica el alza de las bases mínimas de cotización a la Seguridad Social y un impacto mucho mayor en los costes laborales. Un encarecimiento de la contratación que no parece oportuno para los empresarios en un momento en el que todas las previsiones certifican ya el frenazo en seco de la economía y del empleo. El propio presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha pedido prudencia al Gobierno a la hora abordar un nuevo incremento del SMI.

La CEOE celebra mañana la reunión de su Junta Directiva y su Comité Ejecutivo y, sin duda, el SMI será un tema a tratar. Entre otros muchos, pues la patronal anda revuelta estos días ante las informaciones que están trascendiendo sobre las negociaciones entre Sánchez e Iglesias y la posibilidad de que el Ministerio de Trabajo acabe en manos de Podemos. En la patronal hay cierto enfado porque ambos líderes hayan acordado de manera bilateral la subida del salario mínimo para 2020, como ya hicieron cuando fijaron un incremento del 22,3% –el mayor de la historia– para 2019. Esperan, no obstante, la llamada del Ministerio de Trabajo para intentar mitigar los daños. El calendario sigue corriendo.

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