Somavía: las soluciones extremas a la crisis producen reacciones extremas

Ginebra, 30 may.- El director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Juan Somavía, advirtió hoy a los líderes políticos de la zona euro que las soluciones extremas a la crisis propiciarán reacciones extremas por parte de la sociedad.

Somavía inauguró hoy la 101 Conferencia Internacional del Trabajo con un discurso que dedicó en buena parte a la crisis en la zona euro y en el que criticó que se confíe ciegamente en los operadores financieros como la única vía para superar esta situación.

Mantener esta espiral "descendente y viciosa", auguró el director general de la OIT, "abre el camino a soluciones extremas que no creo que quieran volver a vivir las democracias europeas".

"Las políticas extremas producen reacciones extremas", dijo Somavía, que consideró "profundamente preocupantes" las políticas que están aplicando los Gobiernos europeos para combatir la deuda.

"La vía exclusiva de austeridad para lograr la consolidación fiscal lleva a un estancamiento con pérdida de empleos, menos protección social y un enorme coste humano, socavando los valores que Europa siempre preconizó", afirmó el director general.

Somavía argumentó que este camino no está aliviando los problemas de deuda pública en la zona euro y que por el contrario "esta configurando una deuda social que también tendrá que pagarse", y lamentó que se estén debilitando principios nacidos de la reconstrucción del continente tras la Segunda Guerra Mundial como el dialogo social.

"Sabemos precisamente que lo que nos ayudará a salir de la crisis será el diálogo y las inversiones productivas que generen empleo, demanda agregada e ingresos fiscales a la vez", defendió.

El director general de la ONU pidió "no defraudar a nuestros jóvenes para lograr una Europa estable en el futuro" y consideró que los gobernantes actuales han defraudado a toda una generación, que sufre una tasa de desempleo tres veces superior a la de los mayores.

Somavía subrayó que "los jóvenes sostienen la mayor carga de la crisis" y denunció la "poca solidaridad entre generaciones", lo que demuestra que el modelo de globalización está en crisis.

En este sentido, el director general de la OIT dijo sentir admiración por "la capacidad de los jóvenes para reaccionar" y por "la reafirmación del activismo que se niega a aceptar el desempleo, el trabajo marginal y la educación costosa y de mala calidad".