Superahorradores: el truco para ahorrar miles de euros sin renunciar al dinero

Algunas personas comienzan a ahorrar desde su infancia. La educación financiera que reciben en casa les hace aprender algunos métodos y técnicas que les resultarán claves de cara al futuro. Este es precisamente el caso de Diego y Richard Gracia, dos hermanos españoles que, según explican en su página web, desde muy pequeños se sintieron atraídos por las finanzas. "Nos inculcaron aquello de estudiar mucho, conseguir sacar adelante una carrera universitaria y encontrar un buen empleo, pero nuestras inquietudes nos han llevado un poco más allá" señalan.

Gracias a ello finalmente se adentraron en el mundo de las inversiones y el ahorro, por lo que ahora son considerados unos expertos en finanzas personales. Después de su éxito 'El Método Rico', han lanzado un nuevo libro llamado 'Superahorradores' donde desvelan algunas claves que todas las personas deben tener en cuenta cuando quieren crear un presupuesto. Tal y como indican en Men's Health, los hermanos consideran que cualquier usuario es capaz de ahorrar, pero la clave está en invertir en aquello que nos hace felices. A esto, hay que añadirle otros aspectos esenciales para conseguir nuestro propósito.

Tres gastos que debes reducir

Además de muchos otros consejos, los hermanos se centran en tres gastos esenciales que todo el mundo tiene y que deberíamos tratar de reducir. Los denominan 'big three', es decir, el pago de una vivienda o alojamiento, la alimentación y el transporte para desplazarnos de un lugar a otro para ir al trabajo o realizar otras tareas. La clave es tratar de minimizar estos gastos para poder seguir invirtiendo nuestro dinero en aquello que nos hace felices.

Para conseguir este objetivo, establecen dos parámetros. Por un lado, si se trata de un desembolso necesario y por otro, cuál es el nivel de felicidad que nos proporciona. Una vez analicemos estas variables, hay que dividir dichos gastos en distintas categorías: necesarios, del día a día, caprichos y desarrollo personal.

En el caso de los imprescindibles, que deben suponer un 50%, el objetivo será reducirlos sin renunciar a la calidad de vida. Para los gastos diarios que además nos aportan mayor comodidad, la clave será disminuirlos pero sin eliminarlos, ya que de lo contrario podrían afectar a nuestro ánimo. Estos solamente deben representar un 20% del presupuesto mensual. Cuando hablamos de caprichos, tenemos que tener en cuenta que no son necesarios y que la felicidad que nos aportan es efímera. Por ello, no deben ser más de un 5 o 10% de los ingresos. Por último, una forma de invertir en nuestro futuro es seguir formándonos y desarrollándonos. Es por ello, que los expertos consideran que dicho gasto debe plantearse como algo esencial y, por tanto, en vez de disminuir debe aumentar hasta más del 20%.