Pueden alterar todo el mercado

Las sanciones por la Superliga ponen en jaque los contratos televisivos del fútbol

El expediente abierto a Real Madrid y F. C. Barcelona por continuar vinculados al torneo puede acabar con su exclusión de la Champions League, lo que restaría valor a la competición y a sus derechos de emisión.

HANDOUT - 01 October 2020, Switzerland, Geneva: UEFA President Aleksander Ceferin attends the UEFA Champions League 2020-21 group stage draw. Photo: Harold Cunningham/UEFA/dpa - ATTENTION: editorial use only in connection with the latest coverage about (the transmission/the film/the auction/the exhibition/the book) and only if the credit mentioned above is referenced in full
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1/10/2020 ONLY FOR USE IN SPAIN
Las sanciones por la Superliga ponen en jaque los contratos televisivos del fútbol
DPA vía Europa Press

El intento de sacar adelante la Superliga Europea de clubes puede traer aún más consecuencias. La insistencia de Real Madrid, F.C. Barcelona y Juventus en apostar por un formato que abandonaron otros nueve equipos puede desencadenar un efecto dominó. La primera ficha en caer llegaría desde la UEFA, que con Aleksander Ceferin a la cabeza tiene el objetivo de sancionar a los tres excluyéndoles de la próxima edición de la Champions League. Algo en lo que insisten otras voces autorizadas del fútbol, que han advertido de que los aludidos deberían estar "asustados". Y que sería de especial impacto en España, donde blancos y culés son los grandes atractivos del torneo. Una decisión que puede alterar la comercialización de los derechos televisivos de la máxima competición europea. Incluso poniendo en cuestión los que ya están firmados. El motivo es que esas posibles multas podrían alterar las condiciones del campeonato, según señalan las fuentes consultadas por La Información

Esas discrepancias entre los impulsores del nuevo campeonato y la institución que controla el fútbol europeo es lo que puede abrir una nueva batalla que implicaría a ambos. El alto coste para las operadoras de emitir los partidos de la Champions League se explica en parte con la participación de clubes de la dimensión como Real Madrid y Barça, que cuentan con seguidores en todo el mundo. En resumen, para las televisiones con derechos no sería lo mismo emitir una competición en la que no compitan entidades de una magnitud como las que presiden Florentino Pérez y Joan Laporta, como aseveran fuentes que conocen el sector consultadas por esta redacción. Circunstancia que es extensible a la Juventus, donde permanece otro de los jugadores que más aficionados arrastra, como es Cristiano Ronaldo.

En España, la titular de los derechos de emisión es Telefónica. La compañía que preside José María Álvarez-Pallete desembolsó 975 millones de euros para televisar a través de sus plataformas todos los partidos del torneo hasta 2024. Una condición de tenedor único que comienza precisamente en este 2021, a razón de 325 millones anuales por temporada. El acuerdo se selló en el verano de 2020, ya con la pandemia en marcha y con la expectativa de que la situación sanitaria hubiera mejorado para el inicio del nuevo contrato. El acuerdo incluía la emisión de la Europa League y de la Europa Conference League, la nueva competición que permitirá retransmitir aún más partidos desde ahora. Dicho precio fue un 15% inferior al que pagó Mediapro por los tres años anteriores, que finalizaron con la final del torneo del pasado sábado.

El último en avisar que la posibilidad de la sanción está sobre la mesa ha sido el presidente de LaLiga, Javier Tebas. El presidente de la patronal de los clubes ha sido el que ha verbalizado que la UEFA puede dar un "susto" a los dos representantes españoles más destacados. Una represalia que podría llegar con un rechazo de la UEFA a admitir su inscripción en la temporada 2021/2022, según ha apuntado Tebas. "Creo que se pueden quedar fuera", ha añadido el dirigente deportivo. Días atrás, el 'jefe' de la Primera y la Segunda División avisó de que no estaría dispuesto a defender a Pérez o Laporta si les excluyen del torneo continental. Aunque como ha apuntado él mismo, la decisión de impedirles participar no depende directamente de Aleksander Ceferin. La última palabra la tendrá el Comité de Disciplina de la institución de fútbol europea, que es el órgano competente para este tipo de cuestiones. 

Hasta el momento, ninguna de las tenedoras de derechos ha reaccionado a las intenciones de la directiva de la UEFA de echar del torneo más visto a tres de los clubes más laureados del mismo. Además de Telefónica en España, otras de las afectadas serían BT Sport en Reino Unido, Mediaset en Italia o Sky Sports en Alemania. Un silencio del que no se espera que salgan hasta que se produzca esa decisión por parte del Comité de Disciplina. Las fuentes consultadas por esta redacción apuntan a que la resolución del expediente a Real Madrid, Barça y Juventus puede conocerse en medio de la Eurocopa, que comienza el viernes 11 de junio. Los clubes sí han reaccionado señalando en que su proyecto sigue vivo y advirtiendo de que no tolerarán las "amenazas" de la institución del fútbol europeo.

Esta represalia añadiría una grieta más a la delicada situación económica de los equipos madrileño y catalán, a los que la pandemia ha afectado de una manera evidente. No concurrir a la fase de grupos del torneo ya les supondría perder ingresos de cerca de 15 millones de euros. Una cantidad que va creciendo en función de si ganan partidos o avanzan hacia rondas como los octavos o los cuartos final. Por ejemplo, el Real Madrid se ha embolsado la temporada recién terminada más de 50 millones de euros por haber llegado hasta semifinales, donde fue eliminado por el Chelsea. Aunque peor aún sería el escenario para el Barça, que ya ha admitido que el dinero que debe destinar a nóminas supera con creces a su previsión de ingresos. A lo que hay que sumar su elevada deuda, que supera los 1.000 millones de euros.

Si la idea de Ceferin se consuma, el terremoto que se producirá no tiene precedentes. Las anteriores sanciones que implicaron no formar parte de la Champions tenían que ver con cuestiones como el incumplimiento del 'fair play' financiero. Esto es lo que le ocurrió al Manchester City, al que se castigó con dos años de ausencia por haber alterado supuestamente sus balances entre los años 2012 y 2016. Pero su exclusión no se llegó a consumar, después de que el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS, por sus siglas en inglés) diera la razón al club inglés. Finalmente, participó con normalidad en el torneo e incluso se le rebajó la multa económica que se le impuso de 30 a 10 millones de euros. Un último recurso que los dos equipos españoles y el italiano siempre tendrán disponible.

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