Este lunes el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado la tasa de inflación del mes de mayo, la cual es tres décimas superior a la de abril. Ante este dato, el sindicato UGT ha alertado de que no subir los salarios supone un "lastre" tanto para la economía española como para el poder adquisitivo de los trabajadores y de las familias.
Una situación que desde UGT califican como "muy preocupante", pues al impacto sobre el precio de las materias primas energéticas, alimentarias y metálicas de la guerra en Ucrania, se suma ahora "el agravamiento de los cuellos de botella de la cadena global de suministros", producidos por el cierre de muchas ciudades en China a consecuencia de la política 'cero Covid' impuesta por sus autoridades.
La pérdida de poder adquisitivo es una de las denuncias del sindicato, el que señala que el continuo encarecimiento de la cesta de la compra, unido al moderado crecimiento salarial (un 2,4% pactado en los convenios hasta abril), "están restringiendo la capacidad de compra de los hogares, lo que repercute de manera negativa sobre la demanda y el crecimiento de la economía española". Es por ello que alerta de que "la actual tendencia inflacionista no va a reducirse significativamente en los próximos meses", pues la tasa de inflación subyacente, "el mejor reflejo de la inflación estructural, no para de incrementarse mes a mes".
"Ya no vale solo con esperar a que cese el shock coyuntural de los precios de la energía. Dada la situación, es necesario actuar para proteger la capacidad adquisitiva de las personas trabajadoras, con el fin de no provocar una contracción económica de gravedad", defiende el sindicato. La organización que dirige Pepe Álvarez recuerda que, "ante el rechazo de la patronal" a negociar un nuevo acuerdo de convenios, el sindicato apuesta por subidas salariales de referencia de al menos el 3,5% en 2022, el 2,5% en 2023 y el 2% en 2024, con la inclusión de cláusulas de revisión salarial que protejan el poder de compra.
Sin acuerdo
A pesar de haber celebrado numerosos encuentros, la patronal aún no ha establecido ningún acuerdo debido a la imposibilidad de imposibilidad de repercutir al coste del producto o servicio las subidas de salarios retroactivas-. Para las organizaciones empresariales es "imprescindible" tener en cuenta las circunstancias específicas de cada sector a la hora de pactar subidas salariales, en un contexto de incremento de costes que las empresas "están tratando de no trasladar a los precios".
Además, considera importante recordar a las empresas "la existencia de mecanismos de inaplicación de las condiciones de trabajo pactadas en los convenios colectivos cuando concurran causas económicas, técnicas, organizativas o de producción", previo establecimiento de un periodo de consultas. Por ello, la patronal apuesta por vincular los incrementos salariales a variables e indicadores económicos "cuantificables y medibles", como la productividad, el empleo, la evolución del PIB el indicador de garantía de competitividad o los resultados de las empresas. s.
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