Vidal-Quadras no comparte el "latigazo fiscal" del IRPF aprobado por Gobierno

Madrid, 20 ene.- El eurodiputado del PP y vicepresidente del Parlamento Europeo, Alejo Vidal-Quadras, no comparte la medida de subir el IRPF aprobada por el Gobierno y no está de acuerdo con este "latigazo fiscal" que penaliza a las capas productivas de la sociedad.

En lugar de apostar por un incremento "tan fuerte" de los impuestos, el dirigente del PP habría optado por profundizar en la reducción de los gastos, según ha explicado durante la presentación de su libro "Ahora, cambio de rumbo", en el que hace un diagnóstico de la crisis y propone iniciativas para salir de esta situación.

No obstante, ha señalado que sí esta conforme con otras medidas de austeridad del Ejecutivo, algunas de ellas incluidas en este libro "breve y digerible" (143 páginas), tal como lo ha definido él.

Vidal-Quadras ha subrayado que el Gobierno de Mariano Rajoy, a quien ha hecho llegar un ejemplar del texto, tiene que poner freno al "vertiginoso" deterioro de España a nivel internacional que se ha producido en el periodo 2004-2012 y en el que el país ha pasado de ser un Estado "respetado y valorado" a ser un lastre.

"Hemos llegado a un punto de fracaso colectivo" que hay que superar, ha afirmado el eurodiputado, tras insistir en que es prioritario volver a levantar "la marca España", y esa tarea la tiene ahora el Ejecutivo y también la sociedad, ha señalado.

También ha aplaudido la propuesta del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, de pedir responsabilidades penales por la mala gestión de fondos públicos al considerar que se debe castigar a aquellos cargos que entren en un estado "de frenesí" y gasten de manera "imprudente e irresponsable".

Ha citado, en concreto, al ex presidente de la Generalitat José Montilla, a quien ha acusado de haber "arruinado" a Cataluña y, sin embargo, ahora tiene un despacho en el Senado como portavoz del grupo socialista, tal como ha recordado.

Sin embargo, no ha querido seguir con más ejemplos cuando se le ha preguntado si incluía en este mismo comportamiento al ex alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ahora ministro de Justicia, que ha dejado el Ayuntamiento con una deuda de 6.891 millones de euros.

Sobre las previsiones del FMI, que augura a España dos años más de recesión, ha señalado que este pronóstico no ha incluido la "variable" de lo que puede hacer el Ejecutivo a partir de ahora para afrontar la crisis, y se ha mostrado convencido de que si este pone en marcha las reformas necesarias "la cosa se puede animar".

Ha tocado igualmente el asunto de la corrupción y ha asegurado que otra de las prioridades de la nueva administración tiene que ser la "recomposición moral" del país, porque la situación actual, con tantos casos en los tribunales, es de "vergüenza ajena", ha dicho.

Desde el conocimiento que le da su condición de eurodiputado, ha señalado que el nivel de "exigencia ética" no es el mismo en todos los países de la UE, y ha puesto como ejemplo el caso de los ERES irregulares en Andalucía, una "obscenidad" -ha calificado- que no está en del "esquema mental" de un finlandés o un sueco.

Puede haber un caso de este tipo cada cinco años, pero no puede ser que ocurra "sistemáticamente en todos los partidos y en todos los niveles.