Ya es oficial: El Gobierno nacionaliza Bankia

  • El Consejo de Administración de BFA, la matriz de Bankia, acaba de nombrar a José Ignacio Goirigolzarri presidente de la entidad y éste ha propuesto nacionalizar el banco. Es cuestión de minutos u horas que el Gobierno anuncie que se hará con la entidad al convertir en acciones los 4.465 millones que le prestó.

Bankia aprueba nombrar a Goirigolzarri como presidente ejecutivo
Bankia aprueba nombrar a Goirigolzarri como presidente ejecutivo
R.Ugalde

Ya es oficial. José Ignacio Goirigolzarri es el nuevo presidente de Banco Financiero y de Ahorros (BFA) y de su partipada Bankia. Como tal, ha propuesto que el Estado nacionalice la entidad matriz, lo que supone hacerse también con el control de la segunda.

Esta operación se llevará a cabo convirtiendo en acciones los 4.465 millones de euros que el FROB prestó a BFA. Como ésta posee el 45% de Bankia, el Estado se convertirá también en su primer accionista.

Además, el consejero de Bankia José Manuel Fernández Norniella ha abandonado el máximo órgano de administración de la entidad, junto a Rodrigo Rato, en la reunión celebrada esta mañana. En ese mismo encuentro, José Ignacio Goirigolzarri ha sido nombrado nuevo presidente de la entidad.

En función de cómo se termine valorando la entidad, ya que las cuentas del banco siguen en el aire ante las exigencias de su auditora Deloitte de que rebaje su valoración, el Estado podría llegar a tener una participación mayoritaria.

Por el momento, los inversores han castigado con dureza a Bankia, cuyas acciones han cerrado la sesión con un caída del 5,8%, lo que recorta su capitalización hasta los 4.247 millones de euros.

Aunque, para ser puristas, debería hablarse de nacionalización parcial, ya que el Estado tendrá un porcentaje del banco, no todo el capital, también es cierto que el número de acciones en manos del Gobierno podría elevarse si, como se rumorea, Bankia recibe también una inyección de 7.000 millones en bonos convergentes convertibles (cocos).

Éstos instrumentos son vendidos por las entidades, para conseguir capital, y comprados por el Estado a cambio de percibir todos los años una rentabilidad pactada y bajo el compromiso de que el banco mantenga siempre unos determinados niveles de solvencia.

En el supuesto de que se incumpliera esta regla, el Gobierno los convierte en acciones, como prevé hacer esta misma tarde con los 4.465 millones que ya le concedió del FROB.

Bankia es la cuarta entidad financiera del país, con cerca de 12 millones de clientes, unos 400.000 accionistas y un volumen de activos de 340.000 millones de euros.

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