Bruselas empeora sus previsiones para España y eleva a 8.000 millones el ajuste

Bruselas lanzó hoy un jarro de agua fría al optimismo del Gobierno español en materia económica. Mientras que el ministro de Economía, Industria y Competitividad español, Luis de Guindos, aseguraba a principios de semana que el Ejecutivo revisaría al alza las previsiones de crecimiento para 2017, la Comisión Europea empeoró hoy mismo las estimaciones para nuestro país,

Así, el organismo europeo asegura en un documento presentado hoy que el PIB español crecerá un 2,3% en 2017, dos décimas menos que lo proyectado el pasado mes de mayo y casi un punto menos que la estimación correspondiente a este año. Además, Bruselas considera que el déficit también se desviará de lo acordado en 2017, pues lo eleva al 3,8%, frente al 3,1% exigido. 

Con estas estimaciones, alcanzar el 3,1% de déficit en 2017 obligaría a realizar un ajuste cercano a los 8.000 millones de euros, por encima a lo estimado por De Guindos. El ministro español, confiado en la inercia de la recuperación, enviará en las próximas semanas medidas estructurales de ahorro de gasto o incremento de recaudación por 5.500 millones de euros. 

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"España sería el único país con un déficit superior al 3% ese ejercicio", aseguró el comisario de Asuntos Económicos y Financieros, Pierre Moscovici, quien recordó los compromisos del Gobierno español en la reducción del déficit durante la presentación de las previsiones de otoño.

Pese a todo, el Ejecutivo comunitario, en su previsiones de otoño", eleva el crecimiento del PIB esperado para este año en seis décimas, hasta el 3,2%. El incremento será del 2,3% en 2017 y del 2,1% en 2018.

Según los cálculos de Bruselas, y a falta de unos nuevos presupuestos con cambios en la política económica y presupuestaria, las administraciones públicas españolas cerrarán este año con un desvío del 4,6%, en línea con la nueva senda fiscal.

Además de la desviación del déficit público de 2017 dos décimas por encima de la previsión actual del Gobierno de Mariano Rajoy y siete con respecto al objetivo, para 2018, Bruselas calcula que el desvío será del 3,2%, cuatro décimas superior al compromiso.

Bruselas cree que el crecimiento del empleo se moderará, aunque el paro continuará descendiendo desde el 19,7% de media con que espera que cierre este ejercicio, al 18% el próximo año y al 16,5% en 2018.

También asegura que aunque se espera que el gasto en pensiones siga aumentando, aunque la caída del desempleo reducirá el gasto en prestaciones.

Además, asegura que la mejora de las condiciones de financiación, por su parte, hará que se siga reduciendo la partida de intereses de la deuda.Optimismo de De Guindos

De Guindos aseguró hoy mismo que las previsiones realizadas por la Comisión Europea sobre España

para el ejercicio 2016 son "positivas", pero que la desaceleración económica en 2017 "no va a ser tan intensa como la que pinta" Bruselas (2,3%).

"Para 2017, la Comisión es cauta y prudente. Plantea una desaceleración que no va a ser tan intensa como la que se pinta en el cuadro macroeconómico de la Comisión, porque vamos a entrar en 2017 con una inercia de crecimiento intenso", señaló de Guindos en unas declaraciones facilitadas a Europa Press.

De hecho, el ministro indicó que las proyecciones de Bruselas "no tienen en consideración" los últimos datos económicos, con un crecimiento para el cuarto trimestre del año que "sigue siendo fuerte".

"La economía española va a entrar con fuerza en 2017 y eso garantiza que el crecimiento económico estará en el entorno del 2,5%", añadió.Objetivos de déficit

Guindos volvió a reiterar que España está plenamente comprometida con los objetivos de déficit público. Al respecto, Bruselas plantea que en 2017 España registrará un déficit del 3,8% del PIB, frente al 3,1% comprometido, pero el ministro ha recordado que ese 3,8% se proyecta en ausencia de cambios en la política económica.

El ministro ha asegurado que el proyecto presupuestario que presentará a Bruselas en las próximas semanas recogerá las medidas a adoptar para cumplir con el prometido objetivo de déficit del 3,1%.

"España está complementamente comprometida con los objetivos, con el 4,6% para este año. Es una cifra que se puede alcanzar confortablemente, de forma holgada, y esperemos incluso que podría estar por debajo, lo que nos permitiría entrar en 2017 con una mejor posición fiscal", destacó.