Las Administraciones Públicas han incorporado 74.789 personas a sus plantillas entre abril de 2016 y abril de 2017, según los datos oficiales proporcionados este viernes por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social. Esta cifra sitúa al sector público en la tercera posición del ránking de ámbitos productivos por capacidad de generación de empleo, solo por detrás del turismo y del comercio, tributarios ambos de una coyuntura singularmente favorable.
El sector público explica uno de cada ocho nuevos empleos generados en España en los últimos doce meses y ha colocado a más gente en este periodo, por ejemplo, que la industria o la construcción, dos de las fuentes tradicionales de puestos de trabajo en España.
Según los datos presentados este viernes por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, el pasado mes de mayo - históricamente favorable para el empleo por la cercanía de la campaña estival - se incorporaron 223.192 personas más a los registros de la Seguridad Social. La relevancia de este registro, frente al de la EPA por ejemplo, es su naturaleza tangible: se trata de personas ocupadas, que han sido dadas de alta en la Seguridad Social y que, por tanto, generan cotizaciones que sirven para pagar las pensiones.2,27 afiliados por cada pensionista
En los últimos doce meses, el número de cotizantes a la Seguridad Social se ha incrementado en 592.513 personas, lo que, sin embargo, no ha servido para mejorar la relación afiliados-pensionistas, esencial para garantizar el futuro de las pensiones y que sigue anclado en una relación de 2,27 afiliados por cada pensionista. Este dato ofrece una doble lectura. La primera es que esa relación es insuficiente para sacar a la Seguridad Social de los números rojos. La segunda es que se necesita un volumen de creación de empleo más importante para equilibrar las cuentas del órgano gestor de las pensiones, al menos bajo las premisas sobre las que funciona ahora.
El paro registrado en las oficinas de los servicios estatales de empleo bajó en mayo en 111.908 personas y dejó la cifra total de desempleados en 3.461.128, la más baja desde enero de 2009. De esa cifra total, alrededor de la mitad (1.810.767) tienen derecho a la percepción de algún tipo de prestación pública. A estas alturas y tras casi una década bajo la sombra de la crisis, ya solo 663.120 perciben una prestación contributiva, mientras que el millón largo restante recibe algún tipo de subsidio asistencial o renta de inserción.
El gasto mensual derivado de la cobertura de estas rentas para desempleados que hace apenas dos años era de 1.700 millones de euros y que en lo peor de la crisis llegó a rondar los 3.000 euros, se situó en mayor en 1.388 millones de euros.
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