Números de la operación

Providence pagó 25 millones por el 81% de Signaturit y liberó un bonus de 2,5

La startup de firma electrónica había levantado algo más de 8 millones de euros en capital de Banco Sabadell o fondos como Bonsai Partners. Su nuevo dueño controla la sociedad desde Luxemburgo.

Los dos cofundadores de Signaturit.
Los dos cofundadores de Signaturit.
L.I.

Es uno de los ejemplos de compra de una startup española por uno de los grandes nombres del 'private equity' internacional. Y los números, hasta ahora desconocidos, salen a la luz: la gestora estadounidense Providence Equity Partners pagó algo más de 25 millones de euros para hacerse con el 81% del capital de la startup de firma electrónica Signaturit. La transacción, que pese a la reducida cuantía se situaría en el 'top 10' de ventas en el mercado español en el año de la pandemia, desbloqueó un bonus para cúpula, principalmente, de algo más de 2,5 millones.

Hasta la Navidad de 2020, Providence se había centrado en grandes operaciones sobre todo del sector de las telecomunicaciones. ONO, Yoigo y, por último, Másmóvil. Se trataba de transacciones que superaban, al menos, las tres cifras. Sin embargo, a finales del pasado año hizo lo que han hecho otros de sus rivales en el 'private equity': reducir la barrera de entrada en compañías y sacar la chequera con una cuantía muy inferior para hacerse con la startup española liderada por Juan Zamora. No se dieron muchos datos públicos. Sólo que compraba la mayoría accionarial, sin más datos sobre la inversión.

El precio pagado por Providence de 25,1 millones de euros, según ha podido confirmar La Información con documentos oficiales, representa una valoración de seis veces los ingresos logrados en ese año 2020, cuando registró unas pérdidas de algo más de 4,4 millones. Esa ratio reducida para una empresa de software como servicio (SaaS). Por ejemplo, hay que tener en cuenta el caso de la plataforma de gestión empresarial en la nube Holded: se vendió por más de 120 millones de euros de precio fijo -con un 'earn out' que lo acercaría incluso a los 200 millones en función de objetivos-. Su ratio respecto a las ventas anualizadas (el ARR por sus siglas en inglés era de cerca de 50 veces.

Esta cifra no generó grandes plusvalías entre inversores, aunque sí que tuvieron un cierto retorno. Hasta la fecha de su venta había levantado cerca de 11 millones  de capital de diferentes inversores. Uno de los socios más relevantes, con una posición accionarial de dos cifras, era Bonsai (10,7%), quien fuera socio inicial de Idealista, Bodas.net o Softonic y que hoy cuenta entre sus participadas con firmas como Exoticca o Lookiero. Otro accionista en importancia era la gestora franco-italiano 360 Capital Partners. Se entiende que el 19% que no tiene Providence, que controla su porcentaje a través de una filial luxemburguesa, está en manos de los fundadores, aunque no se precisa en la memoria anual presentada ante el Registro Mercantil.

Los dos creadores se mantienen en la gestión de la compañía, como consejero delegado y responsable de tecnología. Pero sí que recibieron, como era previsible, el 'bonus' gracias al plan de 'stock options' establecido como incentivo. En concreto, según queda reflejado en esa misma memoria, se repartió 2,5 millones de euros de dinero entre la cúpula directiva y el equipo debido a que esta venta se entiende como un evento que justifica su desbloqueo al transferirse el control de la empresa a un nuevo accionista. En otras ventas como la de Social Point o Privalia se repartieron más de 13 y más de 23 millones, respectivamente, en planes de retribución similares.

Las cifras de Signaturit

Signaturit cerró el año 2020, justo después de la entrada de Providence, con unos ingresos de 5,6 millones de euros, lo que suponía un crecimiento del 80% respecto al año anterior. Los elevados gastos de personal, donde se incluyen el reparto del plan de incentivos, llevó a unas pérdidas de 4,5 millones de euros. "La evolución de la cifra de negocios se considera muy buena, dado la situación económica general", asegura en su informe de gestión, donde se refiere al impacto del coronavirus. Las previsiones para este año es superar esa tasa de crecimiento en ingresos. "La crisis sanitaria que atravesamos ha demostrado que la tecnología de firma digital es una necesidad real", apostilla.

Providence buscaba acelerar su crecimiento para convertirlo en un rival más grande en Europa de gigantes estadounidenses como Docusign. Una de las estrategias a utilizar era la de compras de otras empresas para ganar tamaño y en portfolio de productos. En abril pasado, el fondo de inversión adquirió la compañía española Ivnosys, especializada en soluciones tecnológicas también para identidad digital y firma online,  y anunció la fusión con la propia Signaturit. Por ahora, ambas compañías operan de manera independiente y no se ha producido ninguna unión societaria.

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