El próximo viernes volverá a ser un día clave

El desaire de la Junta de Andalucía deja el futuro de Abengoa en manos de Botín

El Gobierno de Moreno Bonilla sigue buscando la fórmula legal para hacer efectiva su aportación mientras la compañía valora otras opciones que pasan por un nuevo apoyo de los bancos que lidera el Santander

ABENGOA
El desaire de la Junta a Botín deja el peso de socorrer a Abengoa sobre Santander
EP.

Abengoa sigue negociando su salvación. La compañía sevillana que encabeza Gonzalo Urquijo no se rinde y ha conseguido el beneplácito de la banca y los fondos de inversión acreedores para extender el tiempo de negociación de su plan de reestructuración hasta el próximo día 23 de octubre. Tras el desaire de la Junta de Andalucía, que se había comprometido con la propia compañía y con los acreedores a aportar 20 millones de euros al rescate, la empresa busca nuevas soluciones para seguir adelante. La principal, como ya señaló este medio es que sean las propias entidades financieras las que cubran el montante que se preveía que aportase el Gobierno de Juanma Moreno, por lo que ahora el peso del rescate recaería sobre Banco Santander, principal acreedor y negociador.

La entidad que preside Ana Botín se había comprometido en el mes de agosto a aportar algo más de 110 millones de euros al plan de reestructuración de la compañía sevillana, cifra que se obtenía de la suma de los créditos para nueva liquidez y los avales para acometer proyectos. Esta cuantía era la más alta del conjunto de entidades financieras que entraban en el plan anunciado hace más de un mes. En él, la propia firma contaba con la aportación de dinero público del gobierno regional, pero tras descartar -al menos por ahora- estas cantidades, Santander se ha vuelto a poner en guardia, confirman fuentes financieras. 

Solo 20 millones de euros estarían entorpeciendo la salvación de una compañía que da trabajo a miles de personas y que, de acuerdo con los propios bancos, es viable. Fuentes del sector financiero recuerdan que tras esta cantidad que la propia Junta de Andalucía ha calificado como "ínfima" y que lleva a considerar la participación del gobierno regional como "no decisiva" se esconde un importante conflicto político. Este sería el arco de bóveda del problema, sostienen. 

Cabe recordar que el Ejecutivo central -en manos de PSOE y Unidas Podemos- ha apoyado a través de los avales del ICO este proyecto y cuenta con un porcentaje importante de las acciones de Abengoa -adquiridas en el rescate de 2017-. Además, habría visto con buenos ojos la ayuda de la banca al entender que se trata de una compañía que opera en sectores regulados. El papel del gobierno regional, en manos de PP y Ciudadanos, pasaría entonces por la aportación para la que ahora dicen no tener instrumento jurídico. 

Fuentes del sector apuntan directamente al caso Isofotón como la 'excusa perfecta' para este enfrentamiento. En las últimas semanas se ha conocido el desvío de ayudas millonarias concedidas por la Junta de Andalucía -en los años en que estaba en manos del PSOE- que investiga un juzgado de Sevilla. Este mismo jueves salía a la luz que la juez titular había solicitado a la Consejería de la Presidencia de la Junta que aporte más de 500 actas de las sesiones del Consejo de Gobierno andaluz con el fin de conseguir los acuerdos adoptados para beneficiar a la ahora desaparecida compañía de energía solar. 

Este hecho se vería reflejado en las palabras que el propio consejero de la presidencia de la Junta, Elías Bendodo, pronunciaba hace poco más de una semana y con las que daba por descartada la aportación para Abengoa. "En otros tiempos se concedieron subvenciones directas a las empresas y ustedes saben perfectamente lo que ha seguido después", afirmaba en rueda de prensa. "Nosotros no vamos a dar un paso que no esté avalado al 100% por los Servicios Jurídicos de la Junta". En este mismo punto sigue la cuestión.

Esta misma semana y ante la presión que han supuesto para la Junta las últimas declaraciones públicas de Abengoa, el vicepresidente andaluz, Juan Marín, trataba de rebajar el tono de sus socios. El dirigente de Ciudadanos manifestó que los Servicios Jurídicos del Gobierno andaluz estaban analizando la existencia de un marco jurídico que permita ayudar financieramente a Abengoa, abriendo así la puerta a reconducir la participación en el plan de rescate de la compañía. Pero, de momento, sigue sin haber solución. 

Las entidades financieras, con Santander a la cabeza, estarían barajando la posibilidad de acceder a la petición de la compañía y aportar más dinero, pero no hay una decisión tomada, confirman. Por otra parte, Abengoa negocia con proveedores y acreedores, tratando de encontrar un aplazamiento de pagos que le permita tener un balón de oxígeno en lo que a liquidez se refiere. De esta forma podría lograr el beneplácito de unos y otros y firmar de forma definitiva la refinanciación que tantos meses lleva sobre la mesa y de la que están pendientes miles de familias. 

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