Consolida su expansión

Abertis amplía su objeto social a fin de  recuperar terreno perdido en las telecos

La empresa de ACS y los Benetton ha aprobado un cambio en sus estatutos para incluir entre sus fines la gestión y explotación de redes de comunicaciones, sin vinculación directa con la movilidad.

Abertis sede
Abertis estira su objeto social y se abre a recuperar terreno perdido en las telecos
Europa Press

Vienen meses de cambios para Abertis. La compañía, cuyo capital se reparten en un 50% Florentino Pérez y la familia Benetton, ha modificado sus estatutos, entre otras cuestiones, para ampliar su objeto social aludiendo directamente al sector de las telecos, un campo estratégico en el actual escenario de pandemia,  donde la firma lleva años cediendo terreno. En detalle, el texto recogido en el BORME apunta: "Se incluye la gestión y explotación de redes de comunicaciones, telecomunicaciones y demás sistemas de información". Desde la sociedad catalana aseguran que aún no existe ningún proyecto en ciernes, pero la modificación encamina el interés de Abertis por hacerse fuerte en nuevos mercados, en el marco de la política de expansión que ha consolidado su crecimiento en los últimos meses.

El estatuto vigente del gurpo -en manos de Atlantia (50%), ACS (30%) y su filial alemana Hochtief (20%)- apenas mencionaba de 'refilón' el sector de las telecos, un segmento que, hasta el momento, el citado documento trataba como un campo subsidiario para el desarrollo de la actividad de la compañía, siempre supeditado "al servicio de la movilidad y el transporte de personas, mercancías e información" y en el que solo podía acceder una vez obtenida "la autorización procedente". La última modificación del texto estatutario omite ambas limitaciones, lo que abre un nuevo horizonte para Abertis en un momento clave para la expansión del grupo, en el que la empresa está a solo unos meses de que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana recupere el control definitivo de dos de las autopistas más rentables entre el catálogo de concesiones de Abertis en territorio nacional, la AP-7 y la AP-2.

La sociedad puso punto y final a su control sobre Cellnex Telecom -antes Abertis Telecom-, en julio de 2018. Entonces, Abertis se desprendió de su participación del 29,9% en el capital social de Cellnex, la división de telecomunicaciones terrestres del grupo, en favor de la sociedad italiana Connect, filial de Edizione, propiedad de los Benetton. La operación tuvo un reflejo inmediato en el Consejo de Administración de la teleco que, al día siguiente, experimentó la salida de los cuatro consejeros de Abertis en la compañía. Con esta venta, la empresa dio un paso definitivo para la concentración de su actividad en las concesiones de infraestructuras de transportes, el brazo del negocio prioritario para Abertis.

Con la salida de Abertis de Cellnex y la venta de su participación en Hispasat, ACS y Atlantia consolidaron el plan de desinversión en activos no estratégicos para centrarse en las concesiones de infraestructuras de transportes.

Solo un año después de su salida de Cellnex, Abertis vendió el 89,68% del capital de Hispasat, el operador de los satélites españoles, a Red Eléctrica de España (REE) por 949 millones de euros. La venta reforzó la presencia del Estado en la empresa de comunicaciones, dado que Red Eléctrica pertenece  en un 20% a la Sociedad Española de Participaciones Industriales (SEPI). También zanjó el plan de desinversiones de activos no estratégicos que tanto Atlantia como ACS iniciaron después de hacerse con el grupo de autopistas. Ambos accionistas estuvieron de acuerdo en apostarlo todo a la carta de las concesiones, pero, dos años más tarde, la situación ha cambiado. 

El empeño del titular de Transportes, José Luis Ábalos, en un país sin peajes ha puesto en jaque las oportunidades de crecimiento nacional de Abertis. En paralelo, el Gobierno italiano podría vetar las concesiones de Atlantia en el país vecino, lo que abocaría a la pérdida de una batería de contratos millonarios que la familia Benetton controla a través de su filial italiana Autostrade per l’Italia (ASPI). El grifo de las concesiones cae ahora a cuentagotas y el escenario de un año en curso donde la Covid-19 seguirá siendo protagonista tampoco deja unas perspectivas demasiado halagüeñas para la construcción. Las telecomunicaciones se presentan como terreno fértil... y Abertis aún está a tiempo de plantar su simiente.

La diversificación de Abertis ya ha comenzado, al menos, en lo que a la geografía de sus inversiones se refiere. La empresa ha logrado amortiguar el impacto del coronavirus y sortear el escollo del fin de las concesiones en España con la firma de contratos multimillonarios más allá de las fronteras nacionales. En los últimos meses, el grupo se ha hecho fuerte en México, con una inversión de 1.500 millones que le ha otorgado el control sobre uno de los mayores operadores de autopistas del territorio mexicano. En detalle, Abertis y GIC Private Limited -antes Government of Singapore Investment Corporation- adquirieron  el pasado junio el 72,3% de Red de Carreteras de Occidente (RCO), el 70% de manos de Goldman Sachs Infrastructure Partners (GSIP) y el 2,3% adicional de accionistas minoritarios-. El año previo, los ingresos de RCO rondaron los 400 millones de euros.

Y esta no fue la única 'megacompra' que Abertis selló en plena pandemia. El desplome del tráfico no frenó la 'conquista' transnacional del grupo. La firma catalana obtuvo -con su socio Manulife Investment Managemen-, la concesión de los túneles Elizabeth River Crossings (Virginia, EEUU), un contrato que supuso la mayor operación de infraestructuras firmada en el país norteamericano de todo el año 2020. El monto de la adquisición rondó los 2.000 millones y asegurará a la compañía la explotación de esta infraestructura en los próximos 50 años

Además de la citada ampliación del objeto social de la empresa, Abertis ha introducido otro cambio en sus estatutos. El texto vigente atribuye a la empresa "la construcción, conservación, explotación de autopistas en régimen de concesión, bien solo la conservación y explotación y, en general, la gestión de concesiones de carreteras en España y en el extranjero". El nuevo apunte en el BORME amplía el cerco y habla de "la gestión de la conservación y explotación integral de carreteras, autovías y autopistas mediante cualquier modalidad de contrato administrativo, ya sea de concesión o servicios". Todo apunta a que el año en curso llevará a Abertis a abrir su abanico de opciones.

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