El Grupo ACS, en manos de Florentino Pérez, cierra el primer semestre del año con unos beneficios de 523 millones de euros, un 17,1% más que en el mismo periodo de 2018. En cambio, no todo van a ser buenas noticias y a cambio de este resultado, la compañía ha aumentado su deuda hasta los 725 millones de euros desde los 58 millones que registraba un año antes.
Siguiendo con las cifras, las ventas del Grupo ACS en el primer semestre de 2019 han alcanzado los 18.817 millones de euros, lo que supone un incremento del 5,8% con respecto a los primeros seis meses del año anterior.
El beneficio bruto de explotación -ebitda- ha alcanzado los 1.621 millones, lo que supone un aumento del 15,1%, que hasta junio del año anterior. De esta cifra, la concesionaria que comparte con Atlantia ha aportado 130 millones. Por su parte el beneficio neto de explotación -ebit- ha alcanzado los 1.098 millones de euros tras aumentar un 9,7%, lo que supone que el margen sobre ventas se sitúe en el 5,8%.
Por áreas de negocio, Infraestructuras es la que aporta el mayor porcentaje de las ventas con 14.235 millones, seguida por Servicios Industriales con 3.804 millones y Servicios con 786 millones.
Dispara deuda
El grupo constructor mantiene una posición de deuda neta de 725 millones de euros -lo que supone 0,2 veces ebitda- a junio de 2019, aumentando esta cantidad en 667 millones frente al saldo de hace doce meses. Según argumenta la propia compañía en su último informe semestral publicado este mismo lunes, este aumento se debe a la adquisición de Abertis, completada a finales del 2018 por importe de 1.040 millones de euros.
Pero no solo Abertis sería el 'culpable' del aumento de la deuda, ACS también pone el foco en el aumento de la inversión en proyectos energías renovables que se han llevado a cabo durante el primer semestre del año por un importe superior a 600 millones de euros.
Admiten la ralentización de Cimic
La compañía presidida por Florentino Pérez admite la ralentización de su filial australiana Cimic, que en los últimos tiempos ha vivido un vaivén con acusaciones de 'retoque' de cuentas incluido. "El impulso de la actividad en América del Norte, acompañada por el impacto positivo de la divisa estadounidense, ha compensado la ralentización temporal de las ventas en CIMIC en el mercado asiático de construcción", confirma la compañía en su propio informe semestral.
En números, las ventas en la región de Asia Pacífico, en la que opera principalmente con Cimic, se han visto reducidas en un 5,2% durante el primer semestre de este año. Para ello, han caído desde los 4.851 con los que se cerraban los primeros seis meses de 2018 hasta los 4.601 millones con los que zanjaba este periodo este año.
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