Proyecto 'SmartGrids'

Adif planea subirse al autoconsumo y regar de placas solares la red ferroviaria

El administrador de la vía férrea ha arrancado la fase final de la puja para contratar a la firma que elaborará un plan destinado a emanciparse de las grandes compañías eléctricas.

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Un tren de alta velocidad de ADIF
Adif

Adif avanza con paso firme en sus planes para 'emanciparse' de las grandes eléctricas en plena escalada de los precios de la luz. La empresa pública que dirige María Luisa Domínguez ha arrancado la fase final de un proceso competitivo, cuyo importe roza los 3 millones de euros, del que saldrá la firma encargada de elaborar un ambicioso proyecto de autoconsumo energético. Entre otras cosas, el proyecto incluye 'regar' con placas fotovoltaicas los terrenos colindantes a los miles de kilómetros de vías bajo la gestión de Adif, según han confirmado fuertes próximas al concurso consultadas por La Información.  

La empresa pública ha presentado la propuesta a los candidatos bajo el nombre de 'proyecto SmartGrids'. El plan es ambicioso e incluye el diseño de una red de distribución propia que, en última instancia, pasará por la construcción de líneas eléctricas, transformadores y sistemas de telecontrol que permitirán al gestor de la red ferroviaria manejar sus flujos de consumo energético, así como su producción de electricidad de manera más autónoma, logrando así cierto grado de independencia respecto a las compañías eléctricas tradicionales.

La puja ha acaparado el interés de grandes consultoras y firmas del sector que, en su mayoría, han pujado formando potentes alianzas en forma de unión temporal de empresas (UTE) dada la magnitud del proyecto. Adif ya ha elegido a cinco finalistas. Entre ellos se encuentra el consorcio de Cobra, Accenture y Sica, así como la alianza de Everis con la ingeniera de CAF Amplia Soluciones. La propuesta de Indra (que se ha presentado en solitario) y la oferta de la zaragozana Inycom junto a Fundación CirceBarbara IoT, también han superado el primer cribado. La puja de Idom Consultting en alianza con la ingeniera industrial Mytra Control cierra la lista de aspirantes que ha pasado a la segunda fase del proceso.

La puja ha abierto el apetito de las llamadas Big Four (PwC, EY, KPMG y Deloitte) que no descartan sumarse al proyecto en un fase más avanzada

En cualquier caso, el salto de Adif al autoconsumo se encuentra en un estado muy inicial, pues el consorcio que se haga con la 'pieza' se encargará de definir el nuevo modelo y estudiar su viabilidad. En definitiva, el ganador del proceso competitivo ejercerá funciones de consultor para la empresa pública. De hecho, el concurso ya ha abierto el apetito de algunas de las cuatro firmas de servicios empresariales conocidas como Big Four, que no descartan incorporarse al proceso en fases más avanzadas, cuando Adif lance los proyectos destinados a desarrollar sobre el terreno ese nuevo modelo, según las fuentes consultadas.

Más que la urgencia por reducir sus costes energéticos, lo que mueve a la empresa pública es su interés por avanzar en la transformación del grupo hacia un modelo más sostenible. En cualquier caso, el proceso competitivo avanza con paso firme en un contexto de fuerte escalada en los precios de la energía y de gran incertidumbre regulatoria para el sector energético y las compañías electrointensivas entre las que se incluye, por descontado, Adif.

Actualmente, la red bajo la titularidad de Adif supera los 11.963 kilómetros de vías, de los cuales más de 3.400 kilómetros corresponden a instalaciones de alta velocidad. Este entramado, que se extiende por todo el país, supone el punto de partida idóneo para el despliegue de plantas fotovoltaicas. El potencial ganador del citado concurso jugará un papel clave para definir una estrategia que podría marcar el futuro modelo de negocio de Adif. Las fuentes consultadas inciden en que esta transformación es el eje de la iniciativa y no tanto el ahorro de capex (inversión material). 

El Ministerio de Transportes se comprometió este verano a inyectar algo más de 4.690 millones de euros hasta 2025 a la empresa pública, a cuenta del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) de la Unión Europea. Del monto total, Adif recibirá 2.539 millones, mientras que Adif Alta Velocidad ingresará 2.154 millones de dicho fondo. Uno de los propósitos de esta partida es sufragar nuevas inversiones. A la hora de valorar la gestión que Adif sobre dichos fondos, el ministerio ponderará la responsabilidad social de la compañía pública, así como el impulso de un modelo ferroviario seguro, sostenible y eficiente. 

Con todo, el coste energético de Adif es considerable. La última licitación que la empresa pública cerró el pasado febrero para el suministro de energía eléctrica a la red ferroviaria de Alta Velocidad, se saldó por un importe de casi 500 millones de euros para cubrir un periodo de 24 meses. La lusa EDP fue la ganadora indiscutible de una puja en la que la eléctrica se hizo con 18 de los 21 lotesa en liza. Endesa Energía, Gas Natural Comercializadora (Naturgy) y Factorenergía acapararon el resto. Adif incluyó una cláusula en la adjudicación que obligaba a que toda la electricidad suministrada durante los próximos dos años debía ser verde o, al menos, con garantía de origen.

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