Amazon en Estados Unidos vivió hace unos días un momento histórico: un primer almacén logístico de Nueva York logró tras una dura batalla la elección de un comité de empresa. Las organizaciones que lo consiguieron aseguran que han recibido una oleada de peticiones por todo el país para hacer lo mismo en otras instalaciones. En España, la primera representación de trabajadores se constituyó en el primer gran centro que abrió el gigante en España, ubicado en San Fernando de Henares (Madrid). En los últimos años, el fuerte crecimiento de centros e instalaciones del gigante del comercio electrónico, la temporalidad de una parte relevante de las plantillas y la visión especialmente crítica de la compañía respecto a la labor de los sindicatos contribuyen a que la proporción de instalaciones con esta representación siga estancado. Sólo uno de cada diez lo tiene.
La compañía estadounidense aterrizó en España en el año 2011. El primer almacén en San Fernando consiguió contar con un comité de empresa con convenio propio en el año 2015. Desde esa fecha, el crecimiento ha sido fulgurante y hoy cuenta, según apuntan fuentes conocedoras, con algo más de 130 centros de trabajo, entre almacenes y puntos de recogidas propios y subcontratados. De esos, sólo existen 14 comités constituidos, según apuntan fuentes sindicales. El último fue el de Dos Hermanas, la localidad sevillana, donde organizaciones como CCOO denunciaron "prácticas antisindicales y explotación".
Además de esos dos, en el último lustro se han ido incorporando varios centros de diferente tipología dentro de la estructura de Amazon. En Cataluña cuentan desde hace varios años con dos comités en dos almacenes relevantes: el de El Prat de Llobregat, con más de 150.000 metros cuadrados, y el de de Castellbisbal, con casi 30.000 metros. El primero es uno de los más destacados de España y se abrió en el año 2017 y el segundo está centrado en artículos de gran tamaño (conocido en el argot de la empresa como 'non sortable'). Con un formato similar a este último también está el de Illescas, que abrió en septiembre de 2021. A esto hay que sumar estaciones urbanas y pequeños almacenes de 'Prime Now Fresh' en Madrid, Coslada o Barcelona.
En donde no existe ninguna representación sindical es, según explican fuentes de las organizaciones sociales, en otras instalaciones como los 33 que tiene subcontratados y otras estaciones logísticas, espacios 'pop ups' o las cinco infraestructuras que tienen establecidas tanto en El Prat y Barajas para transporte aéreo y en el puerto de Barcelona y Valencia. El crecimiento de todas estas instalaciones ha sido explosivo en los últimos tres años por el incremento de demanda de los productos. Y esa es una de las razones que hay detrás del estancamiento en el avance de los sindicatos para constituir sus propios comités.
Este fuerte incremento del brazo logístico y de las instalaciones es difícil de igualar en cuanto a constitución de representantes de los trabajadores. Según explican desde los sindicatos, se necesitan varios años para que haya la masa suficiente y la trayectoria necesaria para iniciar los trámites. Y en ese tiempo, la infraestructura del gigante se sigue multiplicando. En este año está previsto que se abra un almacén relevante en Castellón (de 77.000 metros cuadrados) o en Girona (85.000 metros cuadrados), entre otros. De acuerdo a las cifras aportadas por la empresa, a cierre de 2021 contaba con una plantilla fija de más de 18.000, a los que hay que sumar todos los empleados contratados a través de Empresas de Trabajo Temporal (ETT).
Esa es otra de las razones por la que la proporción de centros sindicalizados sigue en el 10%. Existe una temporalidad relevante y también mucha movilidad de estos trabajadores para puestos vinculados a la gestión de los almacenes. Tradicionalmente, Amazon ha recurrido a ETTs para completar contrataciones de diferentes centros. Como muestra está el caso de San Fernando de Henares (Madrid) donde, pese a que mantiene un comité de empresa desde hace casi una década, sigue estando muy presente esa 'dualidad' entre los fijos y los temporales.
A estos factores se suman también la visión de la compañía, especialmente crítica con los sindicatos. Esta postura se ha hecho más patente en su mercado de origen (Estados Unidos), donde ha habido una dura pugna para evitar la sindicalización de centros en Alabama o Nueva York (alegando que buscaban una relación 'directa' con los empleados y sin intermediarios), pero también lo ha tenido en España. En Dos Hermanas (Sevilla), hubo en el pasado un intento infructuoso de constituir un comité de empresa, tras el cual, según denunciaron desde Comisiones Obreras, se produjo el despido de dos de los trabajadores que trataron de impulsarlo.
Uno de los mayores empleadores
Amazon es uno de los mayores empleadores de España y no tiene un comité de empresa nacional, ni tampoco un convenio colectivo específico con las condiciones de trabajo negociadas con los representantes de los trabajadores. Al establecerse como centros independientes no fue fácil crear esa representación legal conjunta en un principio. Hoy, por tanto, hay 14 centros con comité pero independientes y además con condiciones de trabajo diferentes. El único marco laboral aprobado de Amazon Spain Fulfillment era el del almacén de San Fernando de Henares. La falta de acuerdo con la empresa impidió su renovación, lo que desembocó en la primera huelga. Finalmente se acabó pactando a mediados del año pasado unas condiciones algo mejores respecto al convenio de logística madrileño, pero eliminando el marco propio. Desde esa fecha, mantiene una 'paz social' en España, sin que haya habido protestas relevantes, ni paros o huelgas.
Fuera de territorio español, Amazon ha sido especialmente beligerante contra todas las iniciativas de los empleados para constituir comités en Estados Unidos. Desde hace dos años se ha intentado crear un grupo de esta naturaleza en uno de los mayores centros del país, ubicado en Alabama. La empresa ha llevado a cabo diversas campañas para frenarlo. Las dos votaciones que se han hecho entre la plantilla han desembocado en una mayoría en contra. La última fue hace un par de semanas. En Nueva York se ha logrado constituir otro, el primero del país tras un duro 'tira y afloja'.
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