Antoñanzas (Viesgo): "Tenemos que lograr la descarbonización en 2050"

Miguel Antoñanzas, presidente de Viesgo y el Club español de la energía, ha participado este lunes en la cumbre de empresarios convocada por la CEOE. El empresario ha afirmado que el compromiso de Viesgo es duplicar su inversión en el sector energético durante los próximos años. Para ello, Antoñanzas pide que se elimine el límite de inversión para estas actividades establecido por el Gobierno.

El directivo ha aprovechado su intervención para resaltar el papel de los sanitarios y el comportamiento ejemplar de la ciudadanía y los sectores que proporcionan servicios esenciales durante los momentos más duros de la pandemia. 

Para él, la reestructuración del sector energético debe hacerse en torno a cinco aspectos: el potencial de Europa, la digitalización, el papel del cliente, la financiación y el énfasis en la energía. Y es que para cumplir todos los objetivos climáticos las empresas privadas deberán tener la capacidad de invertir en los cambios que estos precisan: "Tenemos que lograr la descarbonización en 2050". 

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Mostró el compromiso de la compañía de duplicar sus inversiones en redes de electricidad en los próximos 10 años, aunque para ello instó al Gobierno a eliminar "la principal barrera" que existe actualmente, el límite a la inversión fijado por el Gobierno del 0,13% del PIB". "Pedimos que ese límite sea eliminado o ajustado y combinado con la aprobación de planes de inversión específicos acordados con las comunidades autónomas", dijo.

A este respecto, Antoñanzas afirmó que la transición energética va a necesitar inversiones en redes "muy potentes e innovadoras", y subrayó que Viesgo "puede alcanzar una inversión superior a 1.000 millones de euros en este periodo". "Será sin duda la inversión industrial más importante en la región Noroccidental de España", destacó.

Durante más de una semana (del 15 al 25 de junio), los máximos dirigentes de los principales bancos españoles, de las grandes eléctricas, de los grupos hoteleros y de las empresas del sector turístico, así como del transporte, del motor y los seguros, de la alimentación, la agricultura, la industria o los servicios o la cultura y el deporte propondrán las medidas más convenientes para reconstruir el país y afrontar la crisis económica consecuencia de la pandemia.