Ante la inacción de la banca

Las aseguradoras entran en la guerra del ahorro para cubrir el hueco del depósito

Los pesos pesados del sector aprovechan el espacio dejado por los grandes bancos en imposiciones para lanzar productos remunerados y con revisiones periódicas, que permiten recoger la subida de los tipos.

Las aseguradoras se lanzan al ahorro conservador ante la inacción de la banca
Las aseguradoras entran en la guerra del ahorro para cubrir el hueco del depósito
Europa Press

Las grandes aseguradoras españolas comienzan a hacerse un hueco en la guerra por el ahorro, aprovechando que las principales entidades financieras están retrasando retribuir a los productos financieros tradicionalmente con menos riesgo, como son los depósitos o las cuentas remuneradas. Son los seguros de ahorro, que han estado muertos durante años, pero que con rentabilidades revisables permiten a los ahorradores conservadores ir recogiendo la subida de los tipos de interés, además de contar con el valor añadido de ofrecer una póliza.

En este sentido, Mapfre o Mutua Madrileña han tomado la delantera y han lanzado en los últimos días sendos productos, con rentabilidades que van más allá del 1,5% y que superan la media de los depósitos que comercializan la banca (del 0,7% de acuerdo con los últimos datos del Banco de España). El momento es el propicio. Por un lado, la subida de los tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE) les permite ofrecer a sus clientes un interés ya atractivo y, por otro lado, buscan ocupar el vacío creado por la banca al resistirse a remunerar estos productos, que por ahora concentra todos sus esfuerzos en ofrecer fondos garantizados y de rentabilidad objetivo a los ahorradores más conservadores.

En el caso de Mutua Madrileña, la aseguradora estrenó recientemente el Plan Ahorro Plus Fidelidad, un seguro de ahorro con una remuneración neta garantizada del 1,50% durante el primer año y que está disponible desde 750 euros. Por su parte, Mapfre acaba de sacar al mercado Millón Vida 1, que ofrece una rentabilidad garantizada de hasta un 1,91% de interés anual efectivo a vencimiento, dependiendo de la edad del tomador. En ambos productos, la rentabilidad es revisable, en el caso de Mutua de manera trimestral, por lo que pueden ser una buena opción para aprovechar el ciclo de subidas de los tipos de interés del BCE, que volverá a incrementar de nuevo el precio del dinero en marzo en torno a 50 puntos básicos, hasta situarlo en el 3,50%. Y, el mercado no descarta nuevos incrementos que lo lleve al 4%.

“Ante las subidas de tipos de interés que se produjeron en 2022, consideramos que el mercado ofrecía una oportunidad para ofrecer un seguro de ahorro con estas características: capital e interés garantizados”, explica, Marta León, directora del área de Vida en Mutua Madrileña, quien reconoce que “estamos teniendo una demanda elevada, sobre todo por parte de inversores de perfil conservador que buscan alternativas sin riesgo con las que maximizar su capital”.

Además, estos productos suelen venir acompañados de un seguro de vida. En el caso de la aseguradora que preside Antonio Huertas, el beneficiario en caso de fallecimiento percibirá el capital equivalente a la prima capitalizada a al tipo de interés técnico del 2,52%, mientras que para el producto de Mutua Madrileña los beneficiarios recibirán el ahorro existente en el momento, más un capital adicional del 10% (con un máximo de 1.200 euros).

Las aseguradoras buscan alternativas

Lo cierto es que, con un billón de euros que tienen las familias ahorrados en depósitos y cuentas con una rentabilidad media del 0,64%, según los últimos datos del Banco de España para diciembre de 2022, y con un gran apetito por colocarlos en productos que ofrezcan una rentabilidad atractiva, como muestra son las colas para comprar Letras del Tesoro, las aseguradoras están tomando la delantera.

VidaCaixa, por ejemplo, ha sacado al mercado dos PPA (planes de previsión asegurado), la alternativa de los planes de pensiones de la banca. Se trata del Plan de Previsión Asegurador Destino Jubilación, que ofrece un 2,78% si se tiene el dinero invertido durante 30 años. Mutuactivos, la gestora de Mutua Madrileña, por ejemplo, ha aprovechado el tirón, precisamente de las Letras, para lanzar un fondo de deuda pública española, que invertirá entre un 80% y el 100% de su cartera en activos de renta fija pública, mayoritariamente española y con vencimiento inferior a los tres años. La rentabilidad estimada para el fondo se sitúa en el entorno del 2,5%, con el objetivo de convertirse en una alternativa a depósitos y Letras.

Y estas remuneraciones superan los mejores depósitos a un año que ofrecen los bancos en territorio nacional. Para hacernos una idea, ING, que elevó la rentabilidad de su depósito a doce meses a partir del 1 de febrero, pero aún así el TAE que ofrece está por debajo del 1% (un 0,70%), mientras que para no clientes, la remuneración se queda en el 0,50%; quien sí que puede llegar a superar esta remuneración a un año es la imposición a plazo fijo de EBN Banco, con un 2,15%, pero en este caso, el importe mínimo de la inversión es de 10.000 euros.

Volumen a la baja

Con estas iniciativas, el sector seguros espera captar más dinero bajo gestión, después de que en 2022 (último dato publicado por Unespa) haya caído el volumen en un 1,22%, impactado por la mala evolución de los mercados. Así, a cierre de 2022, las aseguradoras velaban por 186.498  millones de sus clientes a través de todo tipo de seguros de vida ahorro.

Por tipo de producto, son los seguros unit-linked, aquellos en los que el tomador asume el riesgo de la inversión, son los únicos que crecen en comparación con el año anterior. Aumentan el patrimonio bajo gestión un 4,72% y superan los 20.600 millones de euros. Por su parte, los cambios más modestos corresponden a las rentas vitalicias (-0,68%) y los capitales diferidos (-1,68%).

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