Bank of America se cubre las espaldas ante posibles impagos en el futuro con unas provisiones que superan los 1.000 millones de dólares. La entidad recorta así sus ganancias, hasta los 27.528 millones de dólares en 2022 (unos 25.400 millones de euros), lo que supone un 14% menos con respecto a 2021, cuando liberó su colchón ante la mejor evolución de la economía.
El ejercicio 2022 ha sido un año atípico, marcado por la alta inflación y la subida de los tipos de interés, que le han llevado a disparar su margen de intereses por encima de los 52.400 millones de dólares (+22,2%), de tal forma que los ingresos totales del grupo se han colocado en los 94.950 millones de dólares, un 6,55% más.
Sólo en el cuarto trimestre de 2022, el beneficio neto ha crecido un 1,7% en tasa interanual, hasta 7.132 millones de dólares, gracias a que los ingresos totales del grupo aumentaron un 11,2%, hasta 24.532 millones de dólares, superior a las estimaciones de los analistas. Entre octubre y diciembre, Bank of America ha registrado un beneficio neto atribuido de 6.904 millones de dólares (6.395 millones de euros), un 1,9% más que en el mismo intervalo de 2021.
De su lado, la cifra de negocio de la entidad ha sumado en el trimestre 24.532 millones de dólares (22.725 millones de euros), un 11,2% más, con un incremento del 28,7% de los ingresos por intereses netos, hasta 14.681 millones de dólares (13.600 millones de euros). "Acabamos el año con una nota sólida, aumentando las ganancias año tras año en el cuarto trimestre en un entorno económico cada vez más lento", ha destacado el consejero delegado de Bank of America, Brian Moynihan.
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