Bankia sale de Cuba: comienza a liquidar la sociedad que mantenía con los Castro

  • La entidad española liquida Corporación Financiera Habana y se desprende de la última participación industrial de las antiguas cajas 
Foto de la Habana
Foto de la Habana

Bankia ha puesto el punto y final a su aventura en Cuba. Según sus cuentas anuales, el banco que ahora preside José Ignacio Goirigolzarri aún mantiene el 60% de Corporación Financiera Habana, una institución financiera no bancaria –no tiene depósitos- establecida en La Habana cuya función principal era el asesoramiento a empresarios españoles interesados en realizar inversiones en el país. La sociedad, no obstante, está en proceso de liquidación desde mediados de octubre, por lo que la entidad abandonará la isla tras dos décadas de actividad en territorio cubano.

Fue en 1998 cuando Miguel Blesa, expresidente de Caja Madrid, suscribió un acuerdo con el Banco Popular de Ahorro, propiedad al 100% del Gobierno de Cuba, para establecer la primera sociedad mixta de carácter financiero con capital español que iba operar en la isla. Entonces, la antigua caja madrileña desembolsó algo más de 400 millones de pesetas, unos 2,5 millones de euros actuales, para ofrecer financiación a empresas del sector turístico, inmobiliario o de infraestructuras que contasen con participación española.

El rescate financiero y el acuerdo firmado con la Comisión Europea en 2012, no obstante, obligaron a Bankia a desprenderse de sus participaciones industriales, por lo que comenzó un proceso de desinversión que se saldó con la venta progresiva de las acciones que el banco mantenía en empresas como Iberdrola, Mapfre, Iberia (IAG), Indra, Deoleo o NH, entre otras.

La venta de Corporación Financiera Habana, en cambio, no resultó fácil. Ante la apertura de Cuba, Abanca llegó a estar muy interesada en el negocio y Juan Carlos Escotet reconoció su interés públicamente en 2015, cuando aseguró que se trataba de una sociedad "rentable" que la que Bankia debía desprenderse por mandato de Bruselas, aunque al final la operación no cuajó.

Sea como fuere, la actividad de Corporación Financiera Habana fue autorizada tras un acuerdo del Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros de Cuba en 1998, que le otorgó una licencia para operar durante 20 años. Este permiso caducó el pasado 16 de octubre de 2018 y es entonces cuando la junta de accionistas de la sociedad adoptó el acuerdo de disolución y liquidación de la misma, según informan fuentes de Bankia.

Está valorada en 10,62 millones

Hasta su liquidación definitiva, Bankia mantiene esta sociedad en su perímetro. Tiene valorada la participación en de 10,62 millones de euros y, según las últimas cuentas anuales del banco español, Corporación Financiera Habana obtuvo un resultado de 1.000 euros en 2018, frente a los 1,57 millones de euros que obtuvo en 2017. Asimismo, el documento muestra que el grupo contaba con dos empleados en Cuba.

Además de Bankia, los otros dos bancos españoles que cuentan con presencia en la isla caribeña son BBVA y Sabadell a través de sendas oficinas de representación en La Habana. El banco catalán, según sus cuentas, obtuvo un beneficio de 1,64 millones en el país, donde tiene 7 empleados, mientras que la entidad que preside Carlos Torres detalla que cuenta con un empleado en la isla y que su participación en Aurea, sociedad inmobiliaria cubana en la que posee una participación del 49%, está valorada en 5 millones de euros.

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