BBVA aumenta su beneficio a costa de recortes en costes salariales y dotaciones

  • La entidad compensa la caída de los ingresos gracias a la contención de gastos, en especial en España, y la caída de las provisiones en un 17%.
Francisco González, presidente de BBVA
Francisco González, presidente de BBVA

BBVA ha presentado unas cuentas con luces y sombras. El beneficio neto se eleva un 15%, hasta los 2.649 millones, pese a la caída de los ingresos casi un 5%. La entidad se ha visto mermada por el efecto divisa y ha obtenido un menor margen de intereses semestral y trimestral respecto al mismo de 2017. Por otro lado, la entidad consigue mejorar la cuenta por la parte baja con menor gasto y las provisiones reducidas hasta un 17%.

El efecto de la depreciación de la divisa es el gran enemigo del negocio de BBVA. Su apuesta por la internacionalización en países emergentes tiene el peligro de afectar a la cuenta de resultados vía riesgo divisa. Así ha sido, BBVA ha registrado una caída del margen bruto, suma de todos los ingresos, de más de 600 millones respecto al semestre anterior. La principal caída por volumen, casi de dos puntos es en el margen de intereses, por el que sumo 8.643 millones. Además, también sufrió un importe recorte en el RoF, del 33,8%. El aumento de las comisiones no ha servido para endulzar el margen bruto que cae un 5,1%.

En el apartado de costes, BBVA sale favorecido en sus cuentas gracias a la contención en costes, en especial en España. Los gastos de explotación se reducen en un 5,8% en el semestre, y hasta un 6,7% en el trimestre. Todas las partidas del coste caen, lo hace con más fuerza los salariales y de administración en España por el cierre de oficinas, menos los ligados a informática. Con ello, el margen neto, ingresos menos costes, se sitúa un 4,3% inferior en el semestre, compensando la caída de los ingresos.

Por último, el banco ha provisionado un 17% menos lo que le ha ayudado a rebotar su beneficio. En concreto, antes del efecto dotaciones el resultado caía un 4% y después ya subía un 8%, respecto a los seis primeros meses de 2017. Con ello, tras otros pequeños ajustes como los minoritarios y el pago de impuestos, se llega al resultado final de beneficio neto de 2.649 millones, un 15% más.

La reducción de costes le permite crecer en España

En España, la actividad del banco generó un beneficio neto atribuido de 793 millones de euros, un 19,2% más que hace un año. Los ingresos semestrales se redujeron tanto en el margen de intereses, un 1,5% menos, al igual que el RoF que se hundieron un 11,4%. Con ello, el margen bruto de la entidad en el país descendió un 4,7%.

La entidad ha acometido una importante reestructuración de su negocio en España, donde ha eliminado oficinas y empleados. Esa reducción se ha visto reflejada en las cuentas y le ha permitido una reducción de costes del 4,1%, hasta los 1644 millones. La caída se desglosa en un descenso del 3,8% en gastos de administración por mayor automatización y la caída de los costes salariales un 3%.

La tasa de mora en el negocio bancario español fue del 5,2% al cierre de junio, frente al 5,5% de diciembre, con una cobertura del 57%. En cuanto al área de Non Core Real Estate, BBVA ha asegurado que reducirá prácticamente su exposición al negocio inmobiliario tras cerrar el acuerdo con Cerberus en el tercer trimestre del año.

En cuanto a otros mercados, el resultado del negocio en México de BBVA ascendió a 1.208 millones de euros, un 21,2% más, con un avance del margen de intereses del 7,8% y del 8,2% en comisiones. El Turquía, el resultado atribuido de BBVA creció un 25,6%, hasta 373 millones de euros, con un incremento del margen de intereses del 17,9% y una subida de las comisiones del 32,8%. Todo ello en moneda constante, con el efecto divisa se aprecian caídas en muchos de sus mercados.

Por su parte, el negocio en Estados Unidos incrementó un 51,2% su beneficio, hasta 387 millones de euros, mientras que en América del Sur las ganancias de BBVA mejoraron un 30,6%, hasta 452 millones de euros.

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