Botín condicionó estar en la ampliación de Prisa al nombramiento de Monzón

  • El expresidente de Indra y asesor personal de la banquera, dejará el consejo de administración del Santander para evitar conflictos de interés.
Javier Monzón, junto a la presidenta del Santander, Ana Botín.
Javier Monzón, junto a la presidenta del Santander, Ana Botín.

El relevo de Juan Luis Cebrián por Javier Monzón al frente de Prisa fue condición impuesta por Ana Botín para allanar la ampliación de capital de 500 millones de euros en el grupo de comunicación. El expresidente de Indra mantiene una relación personal muy estrecha con la banquera, integra su equipo de asesores personales y forma parte además del consejo del Santander en España desde 2015, cuyo puesto ha decidido abandonar para evitar conflictos de interés, indican fuentes al corriente de la situación.

La contribución de Monzón ha sido clave en la transformación digital emprendida por el grupo cántabro cuya hoja de ruta desplegará por completo hacia el horizonte de 2021 para adaptarse a los hábitos de los nuevos clientes, a la vez que mejora la cuenta eficientando procesos. Su nombre sonó, incluso, para liderar el relanzamiento de Openbank, la filial que introdujo en España la banca telefónica en 1995 y que, tras reinventar estrategia y plataforma tecnológica, busca ser la franquicia online a exportar por el grupo a otros países.

La designación como presidente no llegó a concretarse pero su involucración fue completa en el replanteamiento del proyecto dirigido como consejero delegado de Openbank, Ezequiel Szafir, antiguo socio de Deloitte y exejecutivo del Grupo Cortefiel y Amazon Europa.

Indra compró la consultora de IT de Botín en 2002

Su relación con la presidenta del Santander se remonta muchos años atrás. La empresa de tecnologías de la información Indra, con Monzón al frente, compró Razona en 2002, la consultora de tecnologías y de Internet que había fundado Ana Botín con el nombre original de Coverlink. Cuando el ejecutivo deja Indra en 2015, sustituido por Fernando Abril-Martorell, lo reclama la banquera.

A finales de junio de ese mismo ejercicio, el Santander lo incorporaba al consejo de administración de su filial en España en el marco de la remodelación impulsada por Botín en la subsidiaria donde nombró presidente a Rodrigo Echenique. Se incorporó al máximo órgano de administración en calidad de vocal independiente, junto a Carlos Barrabés y Gonzalo Alonso-Tejuca.

Es un ejecutivo con el que el grupo ha contado en otros procesos de refinanciaciones o saneamientos de compañías. Fue su candidato para sustituir a Felipe Benjumea en Abengoa en el otoño de 2016, aunque no llegó a fructificar.

Dejará los órganos de gobierno del banco

Con la designación en el grupo de comunicación interrumpirá la relación laboral con el Santander, saliendo del consejo de administración, confirmaron fuentes del mercado. Se trata de un política habitual del gobernanza en el banco para evitar conflictos interés.

La llegada de Javier Monzón al consejo de administración de Prisa está prevista para este viernes, cuando se perfile la hoja de ruta para suceder a Juan Luis Cebrián. En un primer momento se barajó su nombramiento como vicepresidente ejecutivo, con el objetivo de que la transición se llevase a cabo de forma sosegada de aquí a que acabe 2017. Sin embargo, esos plazos se van a acelerar para sacar adelante la ampliación de capital prevista.

El objetivo es inyectar 500 millones de euros para sanear las finanzas de la editora de El País. Al cierre del primer semestre de este año, su endeudamiento bancario se situó en 1.543,3 millones de euros y, de ellos, el próximo año le vencen casi 1.000 millones.

El banco suscribirá la ampliación

Y no ha logrado reducir ese pasivo porque aún no ha cerrado la venta de su negocio portugués Mediacapital (que en julio pactó traspasar a la francesa Altice por 440 millones de euros) y frenó en seco la venta de la editorial Santillana, dada la oposición frontal de la familia Polanco (que controla el 17% de Prisa).

El desembarco de Monzón garantiza que Santander (que tiene el 4,1% de Prisa) acuda a la ampliación pero, además, es un hombre de consenso para que ésta inyección de fondos cuente con el respaldo de otros accionistas de referencia como Telefónica (13%) y CaixaBank (4,9%).

Otro de los objetivo es allanar el paso a la llegada de nuevos accionistas, de empresarios españoles que afiancen el control local la empresa, donde ahora el principal accionista es la firma de inversión Amber Capital. Entre los nombres a sondear: José Manuel Entrecanales (presidente de Acciona), la familia Riberas (que controla el fabricante de componentes de coches, Gestamp) y Jaime Castellanos (presidente del banco Lazard en España y, hasta abril, accionista de Vocento).

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