Santander logra 700 millones con los que sanearse tras aliarse con Crédit Agricole

Nueva operación corporativa de Banco Santander tras haber dado a conocer al mercado las líneas maestras de su plan estratégico a medio plazo. El grupo ha sellado un principio de acuerdo con Crédit Agricole para crear un gigante de la depositaría y custodia de valores, una alianza que resultará en plusvalías de aproximadamente 700 millones de euros para la entidad.

Según ha informado el grupo que preside Ana Botín este miércoles, estos beneficios se destinarán a cargos y saneamientos extraordinarios. Aunque la entidad no precisa cuáles, es previsible que una parte se destine a cubrir la 'factura' de los EREs que Santander tiene previsto acometer en España, Reino Unido y Polonia este año y que los analistas calculan en 300 millones de euros. El banco también abrió la puerta la semana pasada a tener que realizar compensaciones adicionales por la ampliación de capital de Popular en 2016.

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En concreto, el principio de acuerdo consistiría en la aportación a Caceis, firma de depositaría y custodia de fondos del banco francés, del 100% de los servicios de Santander en este segmento de negocio en España y del 49,99% en Latinoamérica. A cambio, la entidad española recibiría una participación en Caceis del 30,5% de su capital y derechos de voto, según explica el banco en un comunicado

El 69,5% restante de Caceis seguiría perteneciendo a Crédit Agricole, cuyos servicios de depositaría están presente en Francia, Alemania, Bélgica, Canadá, Hong Kong, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Países Bajos, Suiza y el Reino Unido, mientras que los de Santander en España, Brasil, Colombia y México.

Si efectivamente se lleva a cabo la fusión, prevista para este año, ello le proporcionaría al Santander una plusvalía de aproximadamente 700 millones de euros, un impacto ligeramente positivo (3 puntos básicos) en su capital y una contribución ligeramente positiva en su beneficio ordinario por acción.

La entidad espera aplicar el importe de la referida plusvalía a cargos y saneamientos extraordinarios, si bien la firma del contrato debe ser sometida a consultas con los órganos de representación de los trabajadores del banco galo.