Bankinter cierra los nueve primeros meses de 2018 con un beneficio neto de 404 millones de euros, frente a los 376 del mismo periodo de 2017, lo que supone un 7% más. Una cifra que se sitúa ligeramente por encima del consenso de analistas preveía que la entidad alcanzase en este tercer trimestre los 399 millones.
Una de las claves de la mejora del resultado esta en el aumento del volumen de créditos que tiene Bankinter, que le ha permitido mejorar ingresos en la parte alta de la cuenta. En concreto, la firma naranja ha ingresado por intereses, la partida más importante del banco en la cuenta de pérdidas y ganancias, hasta septiembre 816 millones, un 6,7% más que hace un año.
La importante mejora del margen de intereses ha empujado el margen bruto, la suma de todos los ingresos, hasta los 1.472 millones de euros, un 7,5% por encima del registrado en 2017. Las comisiones han sorprendido en cierta manera, al mantenerse estables -crecen un 6,2%, hasta los 332 millones- pese a que el tercer trimestre, por su efecto estacional, suelen resentirse.
La buena evolución de los ingresos se explica gracias al crecimiento del volumen de prestamos. Bankinter ha aumentado su inversión crediticia en un 4,8%, desde los 52.200 millones hasta los 54.800 millones. Un incremento, que se apoya en una mejora del denominado margen de intereses, la diferencia entre lo que paga por depósitos y lo que ingresa por prestar, un 10%. Además, la firma mantiene su buena dinámica en las comisiones por gestión de activos, que crece un 7% hasta los 122 millones, y representa cerca del 40% de todas las inversiones.
Además, los beneficios vienen acompañados de una importante reducción de las denominadas provisiones, colchón que mantiene el banco para hacer frente a las insolvencias, del 13% y que ha dado 29 millones 'extras' al resultado. Con ello, la entidad ha alcanzado los 552 millones de beneficios antes de impuestos, que finalmente se han quedado en los 403,6 millones finales.
Bankinter saca músculo en rentabilidad
El ROE, o rentabilidad sobre el capital invertido de la entidad, se situó en el 13%, el más alto del sector. Mientras que la ratio de capital CET fully loaded, o capital de máxima seguridad, experimentó una mejora de 24 puntos básicos en lo que va de año y alcanzó al cierre de septiembre el 11,70%, muy por encima de las exigencias regulatorias establecidas para Bankinter en 2018 por el Banco Central Europeo (BCE) y en línea con el resto de entidades españolas.
La entidad señaló que la calidad de los activos sigue una dinámica positiva, con una mejora del ratio de morosidad que mejora hasta alcanzar el 3,2%, lo que supone 52 puntos básicos menos que el mismo dato de hace un año, y 5 puntos básicos menos que el trimestre inmediatamente precedente. Por lo que se refiere sólo al negocio en España, la mora alcanzó una cifra del 2,92%, menos de la mitad que la media sectorial.
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