Toda una revolución. Casi 10.000 jóvenes de toda España están intentando conseguir una de las 500 becas que la Fundación Amancio Ortega ofrece este año para cursar Primero de Bachillerato en Estados Unidos o Canadá. En concreto, han sido 9.749 alumnos que están cursando 4º de la ESO en algún centro educativo español los aspirantes que se han inscrito en el actual proceso. Este año se han batido el récord de solicitantes, ya que en 2016 hubo 9.300 y en 2015 apenas 7.700.
El pasado fin de semana arrancó el proceso para lograr el sueño que cambiará la vida a medio millar de escolares. El viernes y sábado se celebró la primera prueba en 19 sedes de toda España y el éxito de la convocatoria fue tal que las escenas que se vivieron en los hoteles parecían más propias de una oposición o de una convocatoria de las prestigiosas Fulbright.
La fotografía demuestra que las becas de Amancio Ortega llaman cada año a un mayor número de candidatos. Así, mientras el Gobierno ponía en marcha el artículo 155 en Cataluña, decenas y decenas de aspirantes se estaban examinando, en tandas de unos 100 aspirantes, en salas de hoteles habilitadas para la ocasión. Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla... cada dos horas iban pasando al 'aula' para demostrar sus conocimientos mientras sus padres y acompañantes se agolpaban en las puertas del recinto hasta que terminaran la prueba.
Este primer examen consistía en una prueba de inglés conjunta (listening, reading y writing) de 100 minutos. Para poder superarla los aspirantes tienen que obtener 217 puntos sobre un total de 265, una nota alta. Pero es que los promotores del programa quieren que los alumnos que consigan la beca Amancio Ortega tengan un nivel medio-alto.
La renta per cápita, clave
Tras este primer examen se celebrará una segunda prueba de selección en enero. Se trata de una entrevista vía Skype en la que dos profesores examinan a cada aspirante. El alumno escoge un tema y lo expone en inglés a lo largo de tres minutos. Es en esta parte del proceso cuando la Fundación Amancio Ortega tiene en cuenta la renta per cápita de la familia del aspirante. En concreto, la puntuación obtenida en la prueba escrita y la nota media de 3º de ESO cuenta un 40% de la nota final, mientras que la renta puntúa el otro 60%.
Otra de las novedades introducidas este año es la nota media que se exige a los aspirantes: un 7 en 3º de la ESO y un 8 en inglés. Una vez finalizado el proceso, la Fundación Amancio Ortega pagará el 100% del coste de todo lo necesario para cursar el próximo curso académico en Estados Unidos o Canadá. Es decir, abonará el viaje de ida y vuelta a la localidad extranjera de destino, la tasa de escolarización y la convalidación de los estudios, el alojamiento y la manutención en una familia de acogida, un seguro médico y de accidentes y una pequeña asignación mensual para gastos menores de 100 euros.
A cada becario se le asigna una familia de entre la red local que participa en los programas de acogida de estudiantes internacionales con las autoridades educativas de cada país. Todas cumplen los criterios exigidos por las autoridades educativas relativos a la recepción de estudiantes extranjeros. Al igual que ocurre con la localidad de destino o el High School, los alumnos no pueden escoger una familia concreta o determinada. Eso sí, los becados tendrán que mantener una nota media de 6 durante su estancia en América.
Un detalle importante de estas becas es que los adolescentes no pueden regresar a España en Navidad ni tampoco sus padres o familiares pueden visitarles durante su estancia al otro lado del charco. Además, en anteriores ediciones los aspirantes podían elegir a lo largo del proceso el país donde querían estudiar. Ahora no: la organización adjudicará el lugar de destino a través de un sorteo ante notario y de forma aleatoria.
La Fundación Amancio Ortega quiere, además, impulsar los estudios de alumnos gallegos. Por ello, reserva 80 de las 500 plazas convocadas para estudiantes de centros escolares de la comunidad donde reside el fundador de Inditex.
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