El beneficio de Talgo cae un 95% por la crisis de suministros y la alta inflación

El fabricante español de trenes Talgo se ha hecho con un beneficio neto de 1,4 millones de euros en 2022, lo que implica una caída del 95% la cifra registrada el año anterior, en un ejercicio marcado por la crisis de suministros y la elevada inflación, que ha lastrado el ritmo de ejecución de los proyectos.

Tal y como ha anunciado este martes la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), sus ingresos han decrecido más de un 15% hasta situarse en 460,1 millones. En concreto, la compañía ha facturado 246,8 millones en el mercado nacional, que concentra el 53% de la cifra de negocio de la empresa y crece un 18 %, mientras que los ingresos en el mercado nacional se han situado en 222,3 millones, un 14% menos.

Por segmentos de negocio, 436,5 millones -el 93%- corresponde a la actividad de fabricación, que retroceden un 15% en el ejercicio, y 32,6 millones de euros a los servicios de mantenimiento, un 19% menos.

Nuevos trenes para Renfe

La constructora ferroviaria Talgo finalizó a principios de mes las pruebas de homologación de su tren de alta velocidad Avril, adquirido por Renfe para ampliar su flota disponible, según confirmaron fuentes del sector a La Información. Tras terminar la fase de testeo dará comienzo la fase de homologación por parte de los organismos dedicados a la seguridad y calidad, procedimiento que garantizará que se cumplan los estándares fijados.

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La Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria (AESF) y la Agencia Ferroviaria Europea (ERA) serán las encargadas de verificar este cumplimiento. Esta segunda cuenta con un plazo máximo de cinco meses para ejecutar esta verificación. Una vez ambas entidades den su visto bueno, Talgo pondrá a disposición de Renfe los trenes para que comience el procedimiento de formación del personal —maquinistas y personal de servicio—, lo que dilatará aún más los plazos para su puesta en servicio, que ahora mismo apunta a los meses de verano.