Billin, una startup casi desconocida que hace las facturas a más de 25.000 pymes

  • El sistema que manejan “cuenta con todos los niveles de la máxima seguridad bancaria y el almacenamiento es ilimitado".
Billin
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Quizás Billin, no sea una empresa conocida para el gran público, pero 25.000 autónomos y pymes de nuestro país utilizan ya el programa gratuito de esta startup fundada en 2015 para hacer sus facturas, uno de los aspectos que más quebraderos de cabeza ocasiona y que más tiempo ocupa a los pequeños empresarios. Así, el crecimiento de Billin, conocido como el ‘dropbox’ de las facturas, es meteórico y cada mes se registran en ella y usan su programa “entre 3.000 y 4.000 nuevos autónomos y pymes”, cuenta Diego Goya (Madrid, 1986), fundador junto a Marcos de la Cueva (Madrid, 1986) de la empresa.

Billin es, en fin, una herramienta tecnológica por internet, que permite a pymes y autónomos gestionar todo su proceso de facturación y ahorrar tiempo y dinero. También se pueden recibir y almacenar facturas de clientes y proveedores en un único sitio e igualmente existe la posibilidad de conectar toda esta información del profesional con su gestor habitual con un solo clic.

Rondas de financiación si parar

Y la cosa no se queda ahí. Los fundadores aspiran a que a mediados del año que viene haya “entre 150.000 y 200.000 profesionales y pequeñas empresas” que realicen su facturación a través de su producto y a dar el salto en 2019 a Europa y Latinoamérica. “Todavía no hemos alcanzado el break even (punto de equilibrio entre ingresos y gastos de una empresa), “pero con ese volumen del que hablo ya seremos una empresa totalmente viable y rentable”. “Se nos han acercado un montón de países que quieren tener Billin”, explica Diego Goya, “como Colombia, México, Portugal, Alemania, Gran Bretaña… Pero tenemos que analizar un montón de casuísticas y situaciones para ver a qué países damos el salto y hacer una nueva ronda de financiación para crecer fuerte en esos países”.

Billin, creada hace tres años por estos dos jóvenes emprendedores madrileños graduados en Administración y Dirección de Empresas, consiguió el pasado otoño una ronda de financiación de 1,5 millones de euros. "En estos momentos estamos inmersos en una nueva ronda de financiación en la que ya hemos ‘levantado’ prácticamente otro millón y medio de euros” y el año que viene “haremos otra por el doble de esa cifra”, unos 3 millones de euros, “para empezar a tocar ya otros países además de España”, explican.

Lo cierto es que el programa de facturación gratuito de Billin ha sido una verdadera revolución en el sector de los autónomos y los emprendedores. Para usar Billin basta estar conectado a internet y “no exige bajarse ni descargarse ningún programa”. Todas las facturas están agrupadas en un mismo lugar al que se puede acceder desde cualquier sitio y a cualquier hora. Una nube, la de Billin, de almacenamiento ilimitado y a través de la cual se pueden realizar todas las gestiones necesarias de la ‘vida’ de una factura. Desde su elaboración, su envío, su cobro… “Y todo ello de manera fácil y sencilla”.

En España existen entre 4 y 4,5 millones de autónomos, pymes y micropymes a los que Billin les ha facilitado la vida porque les ahorra tiempo, la startup calcula que unas 16 horas al mes a un autónomo medio. “Nuestro sistema, en fin, es muy sencillo y evita un verdadero quebradero de cabeza al que se enfrentan todos los días los profesionales porque sabemos que hoy en día el tema de la facturación es muy complejo”, dicen.

Billin cuenta en la actualidad con 17 trabajadores, dedicados “mitad y mitad” al desarrollo del producto, “que es la parte que más trabajo nos ha costado porque es muy complicado encontrar desarrolladores en el mercado como los que nosotros tenemos”, y a la atención al cliente, porque ésta es una de las máximas de la empresa: “Estar en permanente contacto con el cliente, que nos cuenten lo que necesitan, adaptarnos a sus necesidades y añadir a nuestro producto todo lo que demandan nuestros usuarios, que sus problemas se solucionen casi al instante”.

Y la seguridad: "Tenemos un responsable de seguridad casi desde el principio porque sabemos que es muy crítico que si tú pierdes una factura o tienes un ciberataque es una parte ‘supersensible’ de tu negocio porque es lo que te da de comer”.

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