Bank of America (BofA), uno de los mayores bancos comerciales de Estados Unidos, ha batido expectativas con sus resultados del primer trimestre. La firma ha disparado un 113%% su beneficio neto hasta los 7.560 millones de dólares (6.318 millones de euros), gracias a la liberación de reservas y a los mayores ingresos no financieros, que se han visto parcialmente compensados por el aumento de los gastos. Los accionistas de la entidad están de enhorabuena por doble motivo: el gigante ha sorprendido con el anuncio de un plan de recompra de acciones por 25.000 millones de dólares (alrededor de 20.893,40 millones de euros) y prevé además volver a abonar dividendo en cuanto la Reserva Federal levante el veto actual sobre este tipo de operaciones.
La cifra de negocio neta de BofA hasta marzo se mantuvo en los 22.821 millones de dólares (19.070 millones de euros) a pesar de que los intereses por ingresos le han descendido en el arranque del ejercicio cerca del 16% hasta 10.197 millones de dólares (8.521 millones de euros). El banco capitaneado por Brian Moynihan, que en el primer trimestre del año pasado tuvo que provisionar 4.761 millones de dólares (3.979 millones de euros) para atajar el impacto de la pandemia en sus cuentas, ha registrado en este primer trimestre un efecto positivo de 1.860 millones de dólares tras haber liberado 2.700 millones de dólares en provisiones.
Con EEUU percibiendo ya en su economía los efectos del fuerte ritmo de vacunación y de las ayudas directas aprobadas por el último plan Biden de 1,9 billones de dólares, la entidad ha elevado un 25% los depósitos, hasta 1,8 billones de dólares (1,5 billones de euros). De enero a marzo su ratio de capital de máxima calidad CET1 ha mejorado hasta el 11,8% desde el 10,6% en que se encontraba previamente.
La recuperación se acelera
"Si bien las bajas tasas de interés continuaron lastrando los ingresos, los costes crediticios mejoraron y creemos que los avances en la crisis sanitaria y la economía apuntan a una aceleración de la recuperación", ha asegurado el propio Brian Moynihan. "Gracias a la forma responsable en que hemos operado la empresa durante muchos años, junto con el estímulo del gobierno y la fuerte liquidez de los clientes, pudimos reportar la mejora de las métricas de calidad de los activos y la reducción de los costes de crédito", ha añadido Paul Donofrio, director Financiero, quien también ha incidido en que la compañía ha experimentado "un fuerte crecimiento en nuestros mercados de capitales y negocios de gestión de patrimonios", que es lo que le ha permitido absorber gastos adicionales y seguir registrando 8.100 millones de dólares de beneficios.
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