Cerca de 250 entidades piden el cierre de Ascó porque "no ha superado la ITV"

Barcelona, 1 ago.- La plataforma Tanquem les Nuclears (Cerremos las nucleares) ha recogido el apoyo de más de 240 entidades en su demanda para que no se revoque la renovación del permiso de funcionamiento a la nuclear de Ascó (Tarragona), que a su juicio "no ha superado la ITV".

A pesar de que ayer el Consejo de Seguridad Nuclear dio el visto bueno a la renovación del contrato de explotación de la central de Ascó, que vence el próximo 1 de octubre, los antinucleares denuncian los graves problemas estructurales, que, según apuntan en un comunicado, se hace evidente en la acumulación de incidencias y problemas de funcionamiento, casi un centenar en cuatro años.

Asimismo, critican la "deteriorada política de seguridad", que a su juicio se puso en evidencia con la fuga de partículas radiactivas en noviembre de 2007, "partículas que se dispersaron por el territorio contaminándolo, y que fue ocultada durante más de 4 meses por la dirección de la central y el Consejo de Seguridad Nuclear.

Además, señalan la "falta de control legal" por aquel incidente "ya que han pasado casi cuatro años sin depurar las responsabilidades legales", y advierten del riesgo por la "demostrada inestabilidad geológica" del emplazamiento de Ascó, "motivos más que suficientes para que la central no vuelva a entrar en operación".

La Plataforma arremete contra el informe emitido por el último CSN, ya que no hace referencia a ninguno de los riesgos puestos de manifiesto a raíz de la reciente catástrofe de Fukushima.

Los antinucleares creen que el informe del CSN es "un cheque en blanco" para que los propietarios continúen su negocio "sin molestias" y una "decisión precipitada" del Consejo de Seguridad, que a juicio de este colectivo "vuelve a mostrarse como un organismo sumiso a los intereses y al calendario de las empresas nucleares".

Sobre las necesidades energéticas, la plataforma añade que la electricidad que produce Ascó podría ser sustituida por la generada por otras tecnologías que ya están en funcionamiento y no son tan peligrosas, como centrales de cogeneración con gas, hidráulicas, eólicas, solares o geotérmicas, y recuerdan que en las ocasiones que la central ha parado "no se ha notado en el suministro".