El madrileño barrio de Chamberí, que disputa silenciosamente su supremacía en el sector del lujo al de Salamaca, va cambiando poco a poco de inquilinos. Ahora se trata del imponente chaflán de la calle Nicasio Gallego con la aristocrática calle Covarrubias, a un paso de Alonso Martínez y la politizada calle Génova. El inmueble situado en el número 20 era propiedad del empresario Christian de Hannover, hijo del controvertido aristócrata alemán Ernesto de Hannover y que opera desde hace poco en el mercado del lujo madrileño con sus socios colombianos, a través de su vehículo inversor, la firma Logika European Partners.
Según ha podido saber este medio en exclusiva, el pasado 12 de diciembre de 2019 se formalizó la venta del edificio a la familia madrileña López-Quesada, que adquirieron la propiedad con su nuevo brazo inversor Pool House, creado a su vez el pasado verano. Con este edificio -tasado en 5,4 millones de euros- la nueva firma madrileña, liderada por Álvaro López-Quesada, se estrena en el mercado del lujo. La promoción de Nicasio Gallego 20 llevaba desde 2018 llenando de 'renders' los portales inmobiliarios. Varias agencias de prestigio internacional se ocupaban de su comercialización. Incluso hoy en día una de ellas sigue teniendo su publicidad en la fachada del edificio.
Pool House, en breve, vestirá la fachada con su propia cartelería, ya que es ahora la propia promotora de los López-Quesada quién hará las labores de comercialización del inmueble, que se centrará en captar inquilinos para el 20% de los pisos sin dueño. El otro 80%, según explica a La Información la propiedad, ya están vendidos. El target de los ya residentes se circunscribe a españoles y latinoamericanos. Los pisos en venta rondarán los 8.000 euros el metro cuadrado. En cuanto a las características del inmueble de Nicaso Gallego 20 decir que el activo ocupa cerca de 2.000 metros cuadrados y albergará once exclusivos apartamentos, incluyendo dos áticos con terrazas.
El sello 'prime' de Isabel López-Quesada
La nueva propiedad ha creado la sociedad Nicasio Gallego 20 S.L para explotar el inmueble y rehabilitarlo. La semana pasada, según recoge el Registro Mercantil, hizo dos ampliaciones de capital de 551.706 euros para comenzar las obras. Detrás de esta operación 'boutique' está la garantía de Isabel López Quesada, la afamada interiorista de las grandes fortunas y familiar directa de los propietarios. Ella es uno de los grandes nombres de la decoración española que supo abrirse camino en un mundo masculino con figuras tan potentes como Paco Muñoz, Jaime Parladé o el portugués Pinto Coelho. La edición estadounidense de AD la ha nombrado varias veces entre las 100 mejores arquitectos y decoradores del año.
Sus casas son habituales de las revistas internacionales de decoración de alta gama. Y es precisamente su estudio el que llevará a cabo la rehabilitación y diseño de las viviendas de este inmueble de Chamberí. Un segmento (el de la decoración en promociones de obra nueva de lujo) por el que también están apostando otras firmas boutique como Mabel Capital, de Abel Matutes Prats y Manuel Campos. López-Quesada tiene también una fuerte alianza con Amancio Ortega y ha puesto su sello a varias de sus tiendas Zara Home. La arquitecto trabaja para grandes cadenas hoteleras con Barceló. En este momento está ejecutando diversos proyectos en París, el Caribe y Suiza.
Hannover lucha con los Capriles
La propiedad señala a este medio que la mayoría de los nuevos dueños quieren los pisos para habitarlos y no para meterlos en el mercado de segundo mano. Actualmente, según datos de la tasadora Tinsa, el precio del metro cuadrado de segunda mano en Chamberí ronda los 5.000 euros. Esto ayudará a la dinamización de un barrio que lucha por no caer en la gentrificación. O lo que es lo mismo, un mero escaparate para turistas de paso.
Esta operación revela también la pujante posición en el inmobiliario de lujo madrileño de un nuevo actor Logika European Partners, en el que destaca el mediático Christian de Hannover como accionista. El aristócrata se instaló en España desde que contrajo matrimonio en Madrid con la heredera peruana Sassa de Osma en 2018. El empresario tiene categoría del alteza real, ya que es príncipe de Hannover, y está apostando con sus socios colombianos, por el barrio de Chamberí y el de Salamanca, feudo de la familia venezolana Capriles y donde está tomando posiciones también el duque de Westminster.
En la propia página web de la joven compañía, Christian de Hannover se presenta como un joven emprendedor que conoció Madrid tras realizar un MBA en el Instituto de Empresa. Profesionalmente es su primera aventura en el sector inmobiliario. Trabajó durante cuatro años en Safir Consultancy en Dubai. El principal cliente de Saifr fue la Autoridad de Asuntos Ejecutivos de Abu Dhabi, para quien ayudó a desarrollar una instalación de deportes marítimos llamada Yas. Sus socios colombianos, sí tienen una amplia experiencia en el sector.
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