Cinco trucos que todo comprador debe saber para salir airoso del Black Friday

Este viernes muchos han despejado sus agendas de trabajo u ocio con los amigos o la familia para dedicarse al momento que llevan esperando mucho tiempo. Porque este 23 de noviembre se celebra el Black Friday, la jornada de descuentos y rebajas en la mayoría de comercios, desde la moda a la tecnología hasta incluso las tiendas de barrio. Cualquier empresa ya es susceptible de tener su 'viernes negro', por lo que los compradores cada vez tienen más opciones para conseguir numerosos productos a un precio, en teoría, más bajo que el resto del año.

Pero, como nos señalan desde Facua-Consumidores en Acción, el Black Friday "no es la panacea". Es decir, que muchas veces los descuentos son aparentes o no son superiores a los que puede haber más adelante -recordemos que ahora hay rebajas todo el año gracias a la liberalización del comercio-. Por eso, el objetivo fundamental es no volverse loco y no tirar la casa por la ventana si no hay necesidad. 

Teniendo en cuenta que es muy difícil escapar al aluvión publicitario de estos días, en los que vemos el Black Friday por todas partes, hay que tomar en consideración una serie de cosas para que no acabemos con un 'viernes negro' en la cuenta corriente. Un conjunto de consejos o trucos que pueden ayudar a comprar con acierto y, sobre todo, a perder dinero. 

Con solo cinco trucos podemos afrontar el Black Friday con la tranquilidad de que no vamos a terminar haciendo compras innecesarias. Y si las hacemos, tranquilidad, porque hay solución. Tomen nota.

1. Haz una lista: puede parecer algo inútil y poca gente quiere perder el tiempo haciendo una lista, pero no se trata de ninguna locura. Hacer una lista -escrita a mano a poder ser- ayuda a tener claro lo que de verdad se necesita y a establecer prioridades. Además, genera un sentimiento de vinculación con ella: una vez escrita, sentimos la obligación de cumplirla y no comprar nada que no esté anotado en ella. Escribe los productos por orden de prioridad -primero los más necesarios y por último los caprichos o prescindibles-. Por ejemplo, si quieres aprovechar las rebajas para comprar regalos de Navidad, estos deben ir en primer lugar, aunque te muramos de ganas de poner primero el último smartphone o ese abrigo que tanto deseamos. Primero la obligación y después, si se puede, la devoción.

2. Establece un presupuesto: es imprescindible. Si no fijamos una cantidad para gastar el 'viernes negro', se nos irá totalmente de las manos. Hay que hacer un presupuesto realista de cuánto se puede gastar y cumplirlo, al igual que la lista. Debemos pensar que a partir de enero habrá rebajas otra vez y que en el próximo mes tendremos mucho gasto con las fiestas, por lo que es mejor quedarse corto que pasarse en el Black Friday.

3. Rastrea los días anteriores: ahora tenemos la suerte de tener Internet a nuestro servicio, por lo que debemos tomarnos la molestia -si de verdad queremos ahorrar con nuestras compras- de buscar los productos que queremos en las webs de las tiendas donde lo puedan tener para hacernos con la mejor oferta. Esto puede hacerse incluso días antes, pues muchos establecimientos ya tienen puestos los descuentos o al menos permiten conocer la rebaja que van a aplicar a los precios. 

4. Salir de casa con el dinero justo -o un límite en la tarjeta-: como el Black Friday es una tentación enorme, si no queremos pasarnos del presupuesto establecido, es mejor salir de casa -si se va a comprar en tiendas físicas- con el dinero justo. La recomendación es dejar la tarjeta de crédito en casa y llevar el dinero en efectivo, pero quienes teman que les roben o perderlo, pueden pedir a su banco que les ponga un tope en la tarjeta para ese día, y así se aseguran de que no se pasan del límite.

5. Guarda todos los tickets: el último consejo es quizá el más importante. Porque en Black Friday las condiciones de devolución son las mismas que el resto del año. Los comercios dan un mes -30 días hábiles- para cambiar o devolver sus productos, por lo que tenemos que guardar todos los que nos den el 'viernes negro', porque de ese modo podremos devolver las cosas que no nos queden bien o que puedan estar defectuosas. Y, sobre todo, porque son nuestro seguro de vida si nos pasamos y nos entra el sentimiento de arrepentimiento. Con el ticket podremos recuperar el dinero y no acumular otra compra inútil más en casa.