La CNMC lo tiene claro. El monopolio de Renfe no llegará a rentabilizar las inversiones de más de 33.500 millones que se han realizado en la red de alta velocidad española (AVE) durante los últimos años, tal y como señala en un informe interno al que ha podido tener acceso La Información. Pese a ello, España sigue construyendo alta velocidad, por lo que a esta importante cantidad, habría que sumar otros 12.951 millones de euros.
De hecho, señala que 2017 ha sido el único año en el que Adif ha generado recursos suficientes para cubrir el coste de su endeudamiento, por lo que el resto de ejercicios no habrían cumplido con sus objetivos. Por ello, urge a la institución publica a aumentar sus ingresos mediante la mejora de la comercialización de los servicios y el incremento y diversificación de la oferta en la red nacional.
"Los costes por amortización de la infraestructura son elevados y crecientes", señala el documento. La fórmula elegida por ADIF Alta Velocidad para la amortización de sus activos supone un incremento anual de este concepto, "en consonancia con la hipótesis de un incremento del tráfico del 3% a lo largo de toda su vida útil", continúa.
"En adelante habrá de ser capaz de generar recursos adicionales para hacer frente a la evolución creciente de las amortizaciones y al riesgo de incremento de los costes financieros ante un volumen de deuda creciente y un cambio de tendencia en la evolución de los tipos de interés", continúa.
El regulador achaca este hecho a, entre otras cosas, la infrautilización de la red nacional, con un uso "muy desigual". Tanto es así que existen tramos, como el que une Albacete y Alicante, en el que la capacidad utilizada es de apenas el 8%, una cifra muy por debajo de la del tramo Madrid-Barcelona, que alcanza el 45%.
Por ello, la CNMC ve como una oportunidad la liberalización que se cierne sobre este servicio. "Ante este contexto, la liberalización prevista de estos servicios a partir de 2020 se presenta como una oportunidad para incrementar significativamente la utilización de la red de alta velocidad y con ello los ingresos del gestor de la infraestructura", confirma el informe.
España, primer país en longitud de red de este tipo de vía en Europa, pero no por ello se ha frenado la inversión. De hecho, "la intensidad inversora no ha decaído", señala el informe, ya que de acuerdo con los datos de la UIC España es el país europeo en el que se están construyendo un mayor número de kilómetros con 904 más. Pese a ello, los datos señalan que el uso efectivo de la red es "inferior al que se registra en otros mercados de nuestro entorno".
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