Primer golpe de gracia de la escalada de precios en el mercado mayorista de electricidad (pool, en la jerga) a las comercializadoras de luz españolas. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha abierto un expediente sancionador contra la catalana Aura Energía por impago de las tarifas de acceso a la infraestructura, una falta tipificada como grave en la Ley 24/2013, de 26 de diciembre, del Sector Eléctrico, según trasladan fuentes conocedoras consultadas por La Información.
El organismo regulador abrió el proceso tras recibir la denuncia contra la firma catalana por parte de Iberdrola y Red Eléctrica (REE) por compras insuficientes en el mercado el pasado noviembre. Se trata del procedimiento habitual, ya que la CNMC no actúa de oficio contra las comercializadoras. Las fuentes consultadas cifran en más de 2 millones de euros el importe que Aura Energía adeuda en concepto de peajes impagados, los cargos que las comercializadoras deben retribuir por el uso de la infraestructura eléctrica.
La firma cuenta con una cartera de más de 15.000 clientes, entre los que destacan cerca de un millar de organismos públicos. El frenazo de Aura Energía en sus compras en el pool abre un roto considerable al sistema eléctrico nacional, dada la envergadura de su cartera de clientes. La compañía, una de las comercializadoras independientes más activas en la batalla del sector contra la reforma eléctrica del Gobierno, dejó de comprar en el mercado de forma abrupta hace varias semanas, lo que alertó de inmediato a REE como gestor del mercado de futuros.
Desde el sector califican el episodio de morosidad de Aura Energía como "inesperado", dado el historial de la compañía en materia de pagos, por lo que atribuyen lo ocurrido al descontrol de precios de la energía. La división de distribución de la compañía que preside Ignacio Sánchez Galán, i-DE, fue la primera en dar la voz de alarma tras comprobar que Aura había dejado de ingresarle el coste derivado de las tarifas de acceso. "Forma parte del procedimiento habitual, cuando hay impagos vencidos relevantes estos se informan al la CNMC", explican desde Iberdrola a este diario.
No es la única comercializadora independiente que se encuentra en la cuerda floja por el descontrol de precios del pool. Relax Energía, con más de 4.200 clientes, adeuda cerca de 250.000 euros en concepto de peajes, mientras que la madrileña Vita Capital Trading (ahora Tameco) también arrastra una larga lista de impagos, según fuentes del sector. Ambas se encuentran en el punto de mira de Red Eléctrica y, por ende, en el foco del organismo que preside Cani Fernández.
La historia de muchas de estas firmas es relativamente reciente pero, en muy poco tiempo, han logrado engordar su cartera de clientes a base de ofrecer precios muy competitivos. La política de precios bajos que con los años ha asumido buena parte de las comercializadoras libres les ha permitido competir con los gigantes del sector, pero también ha recortado sus márgenes hasta el punto que, en un escenario como el actual donde los precios el precio del mercado están a niveles históricamente altos, se han visto en la tesitura de tener que vender la electricidad a pérdidas.
Al no contar con el músculo de los grandes grupos energéticos, estas comercializadoras cuentan con poco margen de maniobra para capear la crisis eléctrica. En los casos más extremos, como el de Aura Energía, la desviación en sus números ha obligado a dejar de comprar en mercado, lo que supone dejar a buena parte de sus clientes en un limbo. Con todo, las fuentes consultadas aseguran que la mayoría de las comercializadoras cuentan con coberturas sólidas y descartan, en principio, un escenario de quiebras generalizadas.
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