La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) se suma a las advertencias del Banco de España y el Banco Central Europeo (BCE) por el ‘calentón’ en los precios de la vivienda. En su último boletín trimestral, el organismo que preside Sebastián Albella, ha subrayado el alza en el precio que han experimentado los activos inmobiliarios entre los principales riesgos que afectan al sector financiero y que lastran su evolución bursátil durante los últimos meses.
“Algunos supervisores bancarios europeos han adoptado medidas que implican recargos de capital para compensar los crecientes riesgos ligados al alza de los precios de los activos inmobiliarios", dice la CNMV en el documento. Hace algunas semanas, Luis de Guindos, vicepresidente del BCE, instó al Banco de España a vigilar de cerca el alza de los precios de la vivienda en algunas zonas de España, como los grandes núcleos urbanos y algunas zonas costeras. Por su parte, el organismo que lidera Hernández de Cos avisó del impacto sobre la banca de una corrección en los precios inmobiliarios.
Como queda demostrado en su último boletín trimestral, la CNMV también vigila de cerca esta circunstancia, que junto a la desaceleración económica y la política de tipos de interés mínimos, lastra el rendimiento en bolsa de los bancos, que también está afectado por el riesgo legal que representa la próxima sentencia europea por al respecto de la transparencia con la que se comercializaron las hipotecas vinculadas al IRPH.
“La evolución de las cotizaciones no fue homogénea entre sectores y valores, concentrándose las mayores alzas en las compañías del sector eléctrico, construcción y bienes de consumo, que se ven favorecidas por las expectativas de mantenimiento de los bajos tipos de interés por un periodo prolongado. En el lado contrario destacaron los valores del sector financiero, cuyos márgenes siguen penalizados por una política monetaria muy laxa en un contexto de desaceleración económica e incertidumbres regulatorias", asegura la CNMV.
Y es que en la actualidad, la ratio del precio de cotización sobre valor en libros de la banca se sitúa en el 0,75, cuando lo normal sería se se aproximara a su valor contable. Solo Bankinter se aproxima a estos niveles. En los peores momentos de la crisis financiera global (a principios de 2009) esta ratio alcanzó el 0,56 y en los momentos próximos al rescate de las cajas de ahorro, en 2012, llegó a tocar el 0,54, según recuerda la CNMV.
Incertidumbre política
En paralelo, la institución que preside Sebastián Albella afirma que la evolución de los mercados de renta variable española puede haberse visto “algo afectada” por la incertidumbre política, pues más de dos meses después de las últimas elecciones, la posibilidad de una nueva cita electoral está ganando fuerza. "Su evolución puede haberse visto algo afectada por incertidumbres de carácter interno relacionadas con el resultado electoral y la formación de un nuevo Gobierno y, por tanto, con las expectativas sobre la política económica y las reformas a llevar a cabo", arguye el organismo.
También contribuyen a elevar los indicadores de estrés de los mercados financieros españoles, que se encuentran en máximos de hace un año, las declaraciones efectuadas por el BCE en relación con la posibilidad de reducir los tipos de interés si fuera necesario y la ya citada baja cotización de las entidades financieras.
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