El magnate Carlos Slim, máximo accionista de FCC, ha destacado la importante caída de los gastos financieros como pilar de la recuperación de la constructora, al mismo tiempo que ha destacado que no invertirá más en España por ahora. El mexicano ha hecho hincapié en que a su llegada a la empresa la estructura financiera ahogaba su rendimiento, cuatro ejercicios después una carga más pequeña le ha permitido recuperar los números verdes.
Slim ha querido estar presente en el 'Investor Day' de FCC, al que ha asistido junto a la presidenta de la constructora, Esther Alcocer Koplowitz. Ambos han dado el pistoletazo de salida a la cita con el inversor, dónde el primer punto clave ha sido poner el foco en la mejoría financiera de FCC.
En 2014, uno de los años más críticos para FCC, la carga de deuda era tan pesada que los intereses, junto a las provisiones, se comían la práctica totalidad de los ingresos. "El gasto financiero era una sangría", ha destacado Slim. Por ello, el propio accionista ha reconocido que el primer punto clave cuando llegó a la empresa fue centrarse en este aspecto. Desde entonces, la deuda de la entidad se ha reducido en un 30%, hasta una posición mucho más cómoda de 4,5 veces ebitda.
"La idea es mantener una posición sana de la compañía", ha destacado Slim durante el turno de preguntas de los accionistas tras responder que, por ahora, no va a invertir más en España. "A través de FCC ya he invertido en varias cosas", ha señalado, dando a entender que en el momento en que decida volver a poner sobre la mesa su dinero lo hará saber.
"Queremos un crecimiento rentable", ha destacado, a la vez que ha puesto sobre la mesa la posibilidad de repartir dividendos durante el próximo ejercicio. El mexicano ha destacado que la empresa tiene unas cuentas lo suficientemente sólidas como para, si la asamblea lo aprueba, repartir los beneficios entre sus accionistas.
Al ser preguntado sobre la posibilidad de aumentar el free-float para salir a cotizar en el Ibex 35, el mexicano ha destacado que "no queremos vender por vender", reiterando que FCC ya no necesita capital.
"La situación financiera, administrativa y operativa de FCC es excepcionalmente buena", ha llegado a decir el mexicano para dar por superado un periodo de crisis en el que la compañía no había conseguido salir de los números rojos.
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