El ocaso de las ferias por la pandemia

El 'efecto dominó' de Ifema asesta otro golpe a restaurantes, hoteles y Barajas

El ERTE del consorcio de Feria de Madrid llega después de un año nefasto para esta actividad y con un panorama de incertidumbre para 2021. Fira de Barcelona y Feria Valencia también tomaron esta medida.

Ifema
El 'efecto dominó' de Ifema asesta otro golpe a restaurantes, hoteles y Barajas
Agencia EFE

Cuando el coronavirus empezó a ser una amenaza real, el primer síntoma del duro golpe que suponía fue el del Mobile World Congress. Hace casi un año, la incertidumbre rodeó al mayor evento de tecnología del país debido a las dudas sobre si era conveniente celebrarlo. La tensión se extendió durante varios días, hasta que los organizadores decidieron cancelarlo después de que numerosas empresas rechazaran ir a Barcelona por el miedo al contagio. Fue ahí donde comenzó la crisis de las ferias, un sector que mueve miles de millones y que en los últimos años estaba en auge. Tras un 2020 muy difícil por la imposibilidad de celebrar todos los eventos previstos, el 2021 ha comenzado con el anuncio de Ifema de que presentará un ERTE para toda su plantilla. Una medida que pone sobre la mesa que este año también será complicado para este negocio. Lo que genera un 'efecto dominó' que afectará a la restauración, los hoteles o las aerolíneas. Y es que si no hay ferias, otros muchos campos también ven perjudicados sus ingresos. 

La decisión de Ifema puede suponer un vuelco total para un sector que ya estaba muy golpeado. Feria de Madrid ha sido la última en plantear el ERTE, después de que en 2020 lo hicieran Fira de Barcelona o Feria Valencia. La diferencia del caso madrileño con el resto de actores es que ya lleva casi un año sin apenas actividad. Fuentes del sector consultadas por La Información aseguran que el consorcio que integran varias administraciones "estaba aguantando bien" y había tomado medidas. Pero no ha podido aguantar más sin dar un paso más, como señalan desde la firma. Según fuentes oficiales, la situación sanitaria y las restricciones de movilidad nacionales e internacionales están detrás de la decisión de presentar un expediente de regulación temporal. Proceso del que no quieren dar detalles "por estar en negociaciones con los trabajadores". Aunque aseguran que esperan mantener la programación que tienen prevista este año.

El problema es que las consecuencias por la imposibilidad de realizar los eventos con normalidad no solo se sufren en Ifema. Su impacto económico es tal que su actividad está considerada como el segundo motor de la Comunidad de Madrid, solo por detrás del Aeropuerto de Barajas, como señalan fuentes del Ayuntamiento madrileño. Por lo que su inactividad se va a trasladar a todo lo que rodea los actos que celebran en sus recintos. Provocando así que las caídas de facturación y de ingresos que fueron constantes en 2020 aún continúen en 2021. Así lo señalan las fuentes del sector consultadas, que estiman que las ferias tenían un impacto económico de hasta 13.000 millones antes del coronavirus. "Nuestra actividad ha caído un 80%, ya que el año pasado apenas celebramos el 20% de lo programado. Por lo que esa falta de movimiento se puede trasladar directamente a otros ámbitos", explican desde la Asociación de Ferias Españolas (AFE), que cifra en 123.000 los empleos directos e indirectos que generan.

Los negocios afectados por los impedimentos para celebrar ferias están vinculados de manera mayoritaria a los servicios. Fuentes del sector citan a la restauración y la hostelería o las aerolíneas como algunos de los ámbitos que más van a sufrir que esta situación se alargue durante 2021. Los hoteles, el turismo de negocios, las promotoras que se encargan de los asistentes y azafatas o las firmas volcadas en diseñar o distribuir regalos también afrontan un ejercicio lleno de complicaciones. Aunque en este último caso, las mismas fuentes apuntan a que todas las compras vinculadas a su actividad tienen por delante un año difícil por culpa de esta problemática derivada de la crisis sanitaria. Lo mismo le puede ocurrir al taxi, además a las compañías que suministran combustible.

Una recuperación que no será inmediata

Como admiten fuentes de las organizaciones de ferias, la recuperación de la facturación para todas las empresas que estaban volcadas económicamente en su sector no será inmediata. Sobre todo, porque Ifema, Fira, Feria Valencia o Bilbao Exhibiticion Centre (BEC) aún tienen desafíos por delante. El motivo es que hay ámbitos que celebraran grandes eventos de este tipo que ahora no pueden ni planteárselo por las pérdidas de la pandemia o que tendrán que repensar la manera de hacerlo porque su volumen de negocio ha caído por culpa del virus. Las fuentes consultadas señalan que esto será un proceso que abarcará varios años, cuyo comienzo se sitúa en el segundo semestre de 2021. "La crisis en términos económicos es parecida a la de 2011. Por ese motivo, la experiencia pasada nos indica que no va a ser inmediato. Nos iremos recuperando en 2022, 2023 e incluso 2024", matizan desde AFE. 

Mientras analizan cómo empezar esa recuperación, tanto las empresas que quieren impulsar eventos de este tipo como quienes los organizan ya empiezan a asumir que este año aún será complicado. Tanto unas como otras ya han cambiado las agendas y han aplazado las celebraciones a distintas fechas. El escenario más optimista es el del segundo trimestre, donde se espera que sean una realidad las nuevas ediciones de Fitur y del Mobile World Congress. De hecho, se espera que entre abril y mayo tengan lugar la mayoría de las agendadas. Pero hay otras que han decidido ser más conservadoras y moverse hasta 2022, como ha hecho una especializada en cerámica, Cevisama, que será organizada por Feria Valencia.

Que no se produzcan más aplazamientos o cambios depende de cómo evolucione la pandemia. Algo que no se reduce solo a España, ya que este sector vive de los desplazamientos internacionales que trasladan hasta las ferias a miles de personas interesadas en lo que se ofrece en estas. Por eso, la vacuna es una de las claves para la viabilidad de los próximos meses. Aunque la previsión es que los recintos ya estén limitados de por sí. Fuentes del sector apuntan a que muchas tendrán que reducir su tamaño debido a que menos gente podrá acudir. Y así será durante un tiempo hasta que las inmunizaciones estén consolidadas. 

El virus golpeó con fuerza a este ámbito desde el principio. Que su acción se base en los desplazamientos de numerosas personas desde distintos puntos del mundo, los encuentros en recintos cerrados y las visitas a los 'stands' de profesionales o público en general provocaron que tuvieran que aplazar o directamente cancelar cientos de actividades programadas. De hecho, la explosión de la pandemia en España en marzo coincidió con el inicio de una de las dos etapas fuertes para el sector, que abarca desde ese mes hasta principios de verano. Esto provocó que las firmas que acogen y organizan estos grandes eventos tuvieran que pensar alternativas, como las 'ferias virtuales', que es una de las opciones que se prevé que Ifema emplee durante 2021. Aunque otras, como el Bilbao Exhibition Centre (BEC) mantuvieron los actos presenciales con las medidas sanitarias correspondientes.

Mostrar comentarios