Red Eléctrica de España (REE) busca socios en el negocio de las telecomunicaciones. La compañía que preside la exministra Beatriz Corredor pretende un socio "estratégico" para la filial de satélites Hispasat y un socio financiero para la empresa de fibra óptica Reintel. En el esquema que maneja el consejero delegado del grupo, Roberto García Merino, ambos socios serán minoritarios. La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), que controla un 20% del capital y cuenta con tres consejeros en el órgano de administración de REE, sigue con atención el proceso después de que la compañía presentara el nuevo plan estratégico y anunciara un recorte del dividendo a partir del próximo año.
REE trabaja en dos frentes. El primero es el de gestor del sistema eléctrico y "ejecutor" de los planes del Gobierno para ampliar la red de transporte y absorber toda la producción renovable prevista en la próxima década (60 GW). El segundo, su posición de refugio para la inversión gracias a sus ingresos regulados y un dividendo que no ha dejado de crecer a buen ritmo en los últimos años. En REE participan grandes fondos (Crédit Agricole, Black Rock, Capital Group, Lazard...) poco partidarios de sorpresas. REE cotiza en el Ibex, tiene dos terceras partes de su capital en manos de inversores institucionales extranjeros y está obligada a ofrecer rentabilidad.
En su papel de gestor, REE ha anunciado inversiones de 2.800 millones en la red hasta 2026. Como opción de inversión, ha adelantado la búsqueda de nuevos socios para los negocios de telecomunicaciones. Sobre ambos frentes planea la sombra del recorte de ingresos regulados aprobado en 2020 que ha obligado a la compañía a meter la tijera en la retribución al accionista y a buscar salidas en áreas con potencial de crecimiento como las telecomunicaciones.
Debate interno
El debate interno sobre el nuevo plan estratégico y la búsqueda de socios ha barajado otras opciones. Entre ellas, pelear ante el Ministerio de Transición Ecológica para convencer a la vicepresidenta cuarta del Gobierno, Teresa Ribera, de la necesidad de elevar los ingresos regulados de la compañía para financiar el esfuerzo que requiere el proceso de transición energética y mantener la confianza de los inversores. Pero las cartas están echadas. Todo, según la empresa, en perfecta sintonía con la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC), con el primer accionista SEPI y con el Ministerio de Transición.
La SEPI se reserva la opinión sobre la búsqueda de nuevos socios para Reintel y para Hispasat -la compañía de satélites que REE adquirió a Abertis por 933 millones en 2019 - hasta que se plantee formalmente ante el consejo. De momento, REE explora por su cuenta el interés de posibles compradores. Todavía no ha elegido asesores para la operación, según precisan fuentes conocedoras del proceso.
La venta parcial de Hispasat es un reto. Fuentes de REE, el vendedor, aseguran que el interés comprador es un hecho ya detectado. Otras fuentes al tanto de los debates internos en la compañía apuntan a dificultades porque el negocio de los satélites -Hispasat gestiona siete que dan cobertura a Europa y el continente americano- está en reconversión. El futuro, aseguran, pasa por el desarrollo de satélites de alto rendimiento (HTS por su abreviatura en inglés de High Throughput Satellites), un salto pendiente para Hispasat. En 2020, REE realizó una provisión por el deterioro de los activos intangibles y el inmovilizado material de Hispasat por valor de 122,3 millones de euros. El socio "estratégico" debería ayudar a convertir Hispasat en un "operador referente" en la prestación de servicios avanzados de comunicación.
Necesidades financieras
La búsqueda de socio para la filial de fibra óptica Reintel responde a otra necesidad: la financiación. Los planes de REE prevén una inversión de 115 millones para el negocio de fibra óptica en los próximos años. El nuevo socio debería apoyar a REE en un esfuerzo conjunto para desarrollar el despliegue de 5G y del conjunto de la red en España. Los puntos de crecimiento identificados son la digitalización de los sectores económicos, la movilidad y la transmisión de datos.
Todos los movimientos estarán controlados desde de la SEPI, la CNMC y el Ministerio de Transición Energética. Competencia empujó en la última etapa de José María Marín Quemada como presidente para aumentar el control sobre la solvencia y los activos de las empresas reguladas y el Gobierno plasmó esa voluntad en el anteproyecto de Ley del Clima que tramita el Congreso. Según la norma, todas las compras, si las hay, tendrán que ser comunicadas a partir de la aprobación de la ley. Sean compras de la matriz o de las filiales.
