El grupo Cortefiel, que acaba de rebautizarse como Tendam, dota de nuevas funciones a una de sus marcas históricas: Milano. En 2009, cuando la crisis ya hacía estragos en el comercio, la compañía decidió echar el cierre a su tradicional cadena de confección y sastrería masculina. Pero la marca no ha desaparecido. En estos años ha seguido comercializando sus prendas, incluso, también femeninas, por ejemplo, a través del 'outlet' de la compañía Fifty.
Tras años de latencia, el grupo ha vuelto a dotar de nuevas funciones a la marca. Podrá vender bajo su paraguas productos que, hasta ahora, no han estado en su catálogo, como cosmética y perfumería. También realizar nuevos servicios, como publicidad, gestionar negocios comerciales o de venta online, según ha solicitado a la Oficina de Patentes y Marcas. Hasta ahora, la venta online la ha realizado a través de la web de la citada Fifty.
La compañía matiza que, pese a estos movimientos, no tiene entre sus planes el relanzamiento como cadena, según indica a través de un portavoz. Las nuevas funciones, añade, se deben a que está ampliando la cobertura de los servicios que puede prestar con la marca.
No es lo único que ha cambiado en el perímetro de Cortefiel en los últimos meses. A mediados de abril, la compañía anunció su bautizo como Tendam, bajo la que penden las mismas cadenas que ha mantenido hasta ahora: Cortefiel, Pedro del Hierro, Women'secret, Springfield y, la citada, Fifty. Actualmente, suma 2.000 establecimientos en 90 países. Era una forma de dar carpetazo al pasado y olvidar la transformación y los ajustes de perímetro que ha tenido que realizar en los últimos años. Su objetivo es posicionarse en lo que denomina 'premium mass market'.
Ya como Tendam, la compañía busca consolidarse y recuperar a un tipo cliente al que renunció años antes, sobre todo a través de su buque insignia, Cortefiel, que se mantiene como marca. En su última memoria, correspondiente al ejercicio 2016, la compañía asume que ha tenido que realizar un "profundo plan de reestructuración", que le supuso una factura global extraordinaria de 22,4 millones de euros. Tuvo, incluso, que liquidar colecciones en sus 'outlets' y destruir mercancía.
Salida a bolsa en el horizonte
Con nuevo nombre corporativo, sobre la dueña de Women’secret sobrevuela su salida a bolsa. Públicamente, la compañía no lo ha confirmado. "No voy a comentar nada al respecto, ni confirmo ni desmiento", se limitó a decir su consejero delegado Jaume Miquel en el último encuentro que ha mantenido con medios de comunicación.
La idea pasaría por dar el salto al parqué en la segunda mitad del año y, para poner en marcha esa oferta pública de venta (OPV), habría contratado a tres bancos Morgan Stanley, Credit Suisse y Nomura, según la información publicada por Expansión.
Volver a cotizar sería la gran decisión corporativa de CVC y PAI, las dos firmas de inversión que el pasado año compraron su participación a Permira, el tercer socio con el que lograron el control de la otrora empresa de distribución controlada por la familia Hinojosa. Cortefiel volvería así al parqué doce años después de dejarlo, pero con otro nombre que le permitiría hacer 'borrón y cuenta nueva'.
También ha cambiado por completo su cuenta de resultados. El último ejercicio, 2017, cerró en positivo, según adelantó Miquel, lo que le ha llevado a acelerar sus aperturas, con 500 nuevos locales en los próximos cincos años, la mayoría (400) fuera de España. En 2016, disparó sus pérdidas. Las multiplicó por diez: más de 54 millones de euros.
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