El banco suizo Credit Suisse ha logrado sortear en buena medida los efectos de la crisis de la Covid-19 al mejorar sus ganancias hasta septiembre pese a que ha tenido que elevar de forma notable sus provisiones en ese periodo ante un posible incremento de la mora por la pandemia, en línea con lo que está sucediendo con el resto del sector. La entidad capitaneada por Thomas Gottstein ha obtenido un beneficio neto atribuido de 3.022 millones de francos suizos (2.827 millones de euros) en los nueve primeros meses de 2020, lo que representa una mejora del 17,7% en comparación con su resultado del mismo periodo de 2019.
Entre enero y septiembre, Credit Suisse destinó 958 millones de francos suizos (896 millones de euros) a provisionar el riesgo de crédito, una cifra que supone un aumento del 438% respecto de los 178 millones de francos suizos (166 millones de euros) reservados para tal fin en los nueve primeros meses de 2019. De su lado, los ingresos del banco helvético hasta septiembre sumaron 17.168 millones de francos suizos (16.059 millones de euros), un 5,4% más que un año antes, mientras que la ratio de capital básico CET1 se incrementó al 13% desde el 12,5% del pasado junio.
En el tercer trimestre, Credit Suisse registró un beneficio neto atribuido de 546 millones de francos suizos (511 millones de euros), un 38% menos que entre julio y septiembre de 2019, mientras que sus ingresos en este periodo disminuyeron un 2,4%, hasta 5.198 millones de francos (4.862 de euros).
No obstante, en el tercer trimestre Credit Suisse destinó a provisiones por riesgo de crédito un total de 94 millones de francos (88 millones de euros), una cifra que representa un incremento del 31% sobre el dato del año anterior, pero un descenso del 68% en comparación con los 296 millones de francos (277 millones de euros) del segundo trimestre.
Asimismo, el banco suizo ha anunciado que el consejo de administración de la entidad tiene previsto aprobar en la junta de accionistas del próximo 27 de noviembre el pago de un segundo tramo de 0,1388 francos suizos por acción correspondiente al dividendo de 2019, mientras que espera reanudar en 2021 las recompras de acciones propias con un programa de 1.500 millones de francos (1.403 millones de euros) al que seguirá otro de 1.000 millones de francos (935 millones de euros) el siguiente ejercicio.
