¿Merece la pena ahorrar unos céntimos repostando en gasolineras 'low cost'?

La única diferencia reseñable es que los aditivos "mejoran el rendimiento del motor y aminoran el consumo de combustible a largo plazo", según AOP.

Abre en Higuera de la Sierra una gasolinera 'low cost', que al no tener personal ofrece combustible más barato
Abre en Higuera de la Sierra una gasolinera 'low cost', que al no tener personal ofrece combustible más barato

Las gasolineras 'low cost' se han multiplicado en España en los últimos unos años. Entre los principales operadores, como Ballenoil o Petroprix, y los supermercados que ofrecen gasolina barata, como Alcampo o Carrefour, rozarán las 800 estaciones de servicio a finales de 2018. Ofrecen el litro de combustible en torno a 5 o 10 céntimos más económico que Repsol, Cepsa, BP y el resto de marcas tradicionales. La gran pregunta es, ¿venden el mismo combustible o es peor para el motor?

Fuentes de la AOP (Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos) aseguran de forma categórica que "la gasolina 'low cost' es totalmente legal. Cumple con todas las normas técnicas y especificaciones de calidad para comercializarse. Los parámetros los marca la Unión Europea y España se rige por ellos”.

La única diferencia reseñable son los "aditivos" que añaden los grandes distribuidores "a la base de la gasolina" antes de la venta en las estaciones de servicio. Sin embargo, también hay "marcas 'low cost' que aditivan el combustible" con productos de diferentes calidades.

Así lo confirma un responsable de GasExpress, la cuarta empresa de gasolineras 'low cost' que más factura en España. "La gasolina está almacenada y distribuida por CLH (Compañía Logística de Hidrocarburos). Por lo tanto, tiene todas las certificaciones y las garantías. La confianza en los productos es máxima. En nuestro caso añadimos un aditivo a la gasolina".

Estos aditivos son sustancias químicas que se añaden en pequeñas proporciones al combustible para potenciar sus propiedades. Es CHL quien los añade a la gasolina en mayor o menos medida, dependiendo de las peticiones del operador que compra el producto. Si no solicitan que añadan ninguna sustancia química, la distribuidora lo envía sin aditivos a las estaciones de servicio.

En la AOP argumentan que los aditivos sirven a largo plazo para "mejorar el rendimiento del motor y aminorar el consumo de combustible" de los vehículos. Por este motivo es por el que "las grandes distribuidores publicitan este tipo de ventajas y las 'low cost' no, ya que incurrirían en publicidad engañosa". Diferentes estudios cifran las ventajas a partir de los 100.000 kilómetros.

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