La venta de Epicom, paralizada

Duro Felguera estudia ajustes de plantilla pese a la "tendencia positiva" en cuentas

  • La compañía asturiana sigue negociando avales con la banca y cuenta con varios posibles socios en conversaciones preliminares. 
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CEDIDA - Archivo

Duro Felguera se encamina hacia una "tendencia positiva" tras un año que su propio CEO, José María Orihuela, ha definido como "muy positivo". La compañía empezó una reestructuración para salir del bache en el que se había metido con la anterior dirección y que llevó a una refinanciación bancaria en 2018. De acuerdo con los datos que la propia compañía ha remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores este mismo sábado, la ingeniería asturiana va por el buen camino, dejando atrás los números rojos. En cambio, y en el seno de las nuevas políticas, Duro Felguera estaría estudiando la posibilidad de llevar a cabo ajustes de plantilla, tal y como el propio Orihuela ha señalado en una conferencia con periodistas. 

La compañía irá ajustando plantilla a medida que los proyectos vayan finalizando y ha señalado que "estamos analizando si es necesaria una reestructuración en nuestra estructura fija". El número medio de trabajadores de la ingeniería se situó a cierre de 2019 en los 1.546 trabajadores, según sus propios datos, cifra que ya había sido recortada en unos 200 con respecto al cierre del ejercicio anterior. "Siempre vamos a primar la rentabilidad de la compañía al mantenimiento de una plantilla que a lo mejor no podemos soportar con nuestra estructura de costes", aseveró. 

La compañía consiguió a cierre del ejercicio de 2019 unos beneficios de 10 millones de euros ante la ausencia de extraordinarios. El año anterior, en 2018, la ingeniería había cerrado con un beneficio de 99 millones al incluir un ingreso de 218 millones como consecuencia de la refinanciación bancaria obtenida ese verano. La cifra de negocio de la empresa ascendió a 397 millones de euros frente los 421 millones que había conseguido un año antes, motivada por las dificultades de contratación ante la falta de avales.

En el mismo sentido que los beneficios se ha comportado el ebitda, dejando atrás los números rojos y consiguiendo 20 millones frente a los -124 millones del ejercicio 18. Con respecto a la deuda, Duro Felguera ha pasdo de 3,5 millones en hace más de un año a un superávit por importe de 16,9 millones a cierre de 2019. "Seguimos con la tendencia positiva comunicada en el primer semestre. Esto ya no es una casualidad, es una tendencia", señalaba el CEO de la compañía. 

Por todo ello, en la compañía confían en hacer cambiar de parecer a los bancos para que les otorguen avales suficientes para contratar durante 2020. "Pensamos que en los próximos meses vamos a tener noticias positivas, no solo con avales del sindicato bancario, también con la posibilidad de entrada de nuevos accionistas", confirmaba José María Orihuela. En este sentido, ha destacado que CESCE ya otorgó en su momento la contragatantía superior al 50% que pedían los bancos tras la refinanciación de 2018, por lo que no ven motivo para la paralización.

Desde 2016, el G5 -los mayores acreedores del grupo, Santander, BBVA, Bankia, Sabadell y CaixaBank- ha reducido de alrededor de 230 o 240 millones en avales, confirmaba. "Entendemos que en algún momento los bancos nos dirán que si nos otrogan esa línea, confío", volvía a decir Orihuela. Además, y debido al caracter internacional de los contratos de la firma, el ejecutivo señaló que su estrategia futura pasará por solicitar avales a las entidades locales, "compañías de seguros o bancos locales", reiteraba. 

Más allá del apoyo bancario, Duro Felguera confirma que se encuentra en conversaciones buscando con sus asesores, varios sin exclusividad, a posibles socios. "Tenemos algunas conversaciones", confirman, pero destaca que se trata de puntos preliminares de las negociaciones. "No hay nadie en proceso de due diligence". En este sentido, confirma la existencia de capital nacional e internacional interesado y reitera, "son simples acercamientos". 

La filial australiana, sin apoyo financiero

Una de las medidas que se ha tomado por parte del consejo de administración de la compañía esta misma semana ha sido retirar el apoyo financiero que venía prestando a su filial australiana Duro Felguera Australia Pty Ltd (DFA). La firma estaba "comercialmente inactiva", por lo que se procederá al nombramiento de un administrador externo.

De esta forma, DFA sale del perímetro de consolidación de Duro Felguera y, dado que los pasivos de DFA serán liquidados con sus propios activos, el grupo ha procedido a registrar a cierre de 2019 los pasivos de DFA a valor razonable, generando un impacto en el resultado consolidado del grupo de 8 millones de euros negativos.  

La venta de Epicom, paralizada

La firma que preside Acacio Rodríguez presentó a la banca en su momento un plan de desinversiones con el que convencerla para que le otorgase los avales reconocidos en la refinanciación de 2018. Entre los activos a los que dar salida, la asturiana colgaba el cartel de 'se vende' en una compañía estratégica, Epicom, que dedica su actividad a la encriptación de comunicaciones. Ahora, y como ya adelantó La Información, la venta de esta "sociedad vital para la seguridad nacional", en palabras del propio CEO, está paralizada. 

La venta de esta firma se estaba disputando entre Tecnobit, empresa del sector, e Indra, que se dedica, principalmente, al ámbito civil. Pese a ello, y según fuentes financieras, también se habrían interesado por esta compañía otras firmas, como una filial de Telefónica. En cambio, y pese a que se trata de una operación de alrededor de 10 millones de euros que ha creado mucho interés en el sector, está en 'stand by'. "No era el momento adecuado. No tenemos una necesidad urgente de venderlo", señaló Orihuela tras la presentación de resultados anuales de la compañía. 

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