El Consejo de Ministros ha aprovechado el acuerdo entre banca y el Ejecutivo para dar luz verde al nacimiento de la Autoridad de Defensa del Cliente Financiero. Este nuevo órgano resolverá las reclamaciones entre clientes y bancos, aunque según ha avanzado la vicepresidenta Nadia Calviño también afectará a los problemas que puedan surgir con los criptoactivos o las fintech. Las decisiones de este órgano serán vinculantes para reclamaciones de hasta 20.000 euros.
Este último paso es muy relevante porque hasta el momento los bancos no estaban obligados a seguir las resoluciones del Banco de España cuando el organismo que lidera Pablo Hernández de Cos daba la razón al cliente. Esta autoridad debería ayudar a aligerar el volumen de reclamaciones legales y, al ser gratuita, su coste no será un impedimento para demandar. En principio, el plazo para obtener una respuesta estaría en los 90 días, según ha adelantado Nadia Calviño, vicepresidenta del Gobierno, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
Los códigos de autorregulación, como el de Buenas Prácticas que se ha reformado este martes para actualizar la protección de los vulnerables a la subida de los tipos hipotecarios, también estarán bajo la supervisión de esta nueva autoridad. Hasta el momento, era el Banco de España el que lo coordinaba e informaba de las entidades adheridas.
Esta nueva autoridad fusiona los servicios de reclamaciones del Banco de España, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones (DGSFP), para dar un punto único al cliente para poder plantear sus demandas.
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