El precio del crudo es muy probable que viva su segundo año consecutivo de subidas ya que este año rebota más de un 8% mientras que el ejercicio pasado cerraba con un alza superior al 50%. Por tanto, la cotización del barril Brent recoge como el exceso mundial de oferta va menguando y como la coalición de los grandes productores (OPEP) y otros países parece estar teniendo éxito al limitar la producción.
La subida del precio del crudo, en máximos de 2015, ha beneficiado a la cotización de las petroleras. En nuestro país, Repsol logra situarse a las puertas de máximos históricos al subir este año más de un 20%, por encima del rebote del Ibex que ha sido de un 12%.
El precio de las acciones de la petrolera se sitúan en los 16,155 euros al subir en la sesión de hoy un 0,44%. Por tanto, se sitúa a las puertas de los 16,47 euros, su máximo histórico si ajustamos la serie de precios a los dividendos que ha repartido la petrolera presidida por Antonio Brufau, tal y como se observa en el gráfico superior.
Es decir, está a menos de un 2% de dicha cota. Todo ello a pesar de que el precio del Brent cotiza en los 61,4 dólares, máximos desde 2015 pero alejado de su nivel más alto en su historia al alcanzar casi los 140 dólares en 2008.
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