Se trataba de un proceso complicado para empresas y particulares. El cambio de compañía telefónica conservando el número fijo se extendía hasta finales de 2013 unos 11 días, a veces más, en los que los consumidores sufrían importantes perjuicios. La extinta Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT) obligó a las 'telecos' a garantizar que ese trascedente cambio se hiciera en solo 24 horas a partir del 1 de julio de 2013. Orange incumplió ese plazo lo que obligó a retrasar la portabilidad fija en un día al 11 de noviembre. Las sanciones de 522.000 y 500.000 euros que le impuso la CMT y su sucesora, la CNMC, acaban de ser confirmadas por el Tribunal Supremo.
La obligatoriedad de implementar el sistema de portabilidad fija en 24 horas fue acordada por la CMT el 26 de abril de 2012. El regulador dio entonces un plazo de 15 meses a los operadores para que se hicieran con la tecnología necesaria para ponerlo en marcha el 1 de julio del año siguiente. Pocos meses antes de que se cumpliera el plazo, Orange solicitó que se ampliara hasta el 9 de noviembre, pero la CMT lo rechazó en dos ocasiones. La compañía previamente denominada France Télecom bloqueó esos planes lo que provocó un retraso de cuatro meses en la implantación de la nueva portabilidad así como las dos multas impuestas a la compañía.
La sentencia de la Sala de lo Contencioso del Supremo sobre el caso publicada ahora confirma la anterior de la Audiencia Nacional. En ella, sus magistrados recordaron que fueron varios los operadores que solicitaron plazos más amplios para implantarla debido a las dificultades técnicas, pero solo Orange incumplió el que la CMT había establecido.
También imputan a este último operador el retraso en hacer los cambios necesarios para conseguir que sus clientes pudieran pasarse a otra compañía conservando su número fijo en solo un día. Desde que la CMT anunció la fecha en la que el nuevo sistema tenía que estar implantado (26 de abril de 2012) hasta que Orange dio los primeros pasos, la compañía dejó pasar seis meses.
Perjuicios a los usuarios
La CMT se vio obligada a retrasar la puesta en marcha del nuevo sistema debido al bloqueo de Orange. La sentencia recuerda cómo la implantación de la portabilidad fija en 24 horas en la fecha en que inicialmente se había planteado sin uno de los principales operadores habría ocasionado importantes incidencias entre los usuarios. Entre ellas un aumento en los errores de portabilidad, problemas de encaminamiento de llamadas, dobles facturaciones, problemas de enrutamiento, conflictos en los traspasos entre operadores, sobrecargas...
Tras las sucesivas multas coercitivas por un total de 522.000 euros que le impuso la CMT, su sucesora, la CNMC, aprobó en julio de 2014 para Orange una nueva sanción de 500.000 euros por la infracción "muy grave" de incumplir una resolución de ese organismo. El macrorregulador argumentó que la actuación "negligente" de la compañía generó daños a los consumidores que no pudieron ejercitar su derecho a cambiar de compañía conservando su número en plazos más reducidos de los establecidos hasta entonces.
Competencia, sin embargo, apreció en la actuación del operación de telefonía una atenuante, que su "conducta infractora" no le había reportado ningún beneficio "directo o indirecto". Los magistrados del alto tribunal también confirman esta última sanción.
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