Emilio Ybarra, el último presidente de Neguri de BBVA, ha fallecido este miércoles a los 82 años de edad como consecuencia de un derrame de cerebral, según informa 'EFE'. El banquero vasco fue el líder de BBV en la década de los 90, y tras la fusión de la entidad con Argentaria en el año 1999, pasó a ser copresidente del banco resultante junto a Francisco González, hasta su dimisión a finales del año 2001.
Ybarra, que nació el 9 de noviembre de 1936 en San Sebastián y que se encontraba en un delicado estado de salud, es licenciado en Derecho por la Universidad de Valladolid y en Ciencias Económicas por la Universidad de Deusto. Fue nombrado consejero delegado de Banco de Bilbao en 1976, accediendo más adelante a la vicepresidencia de la entidad, que empezó a liderar una vez se produjo en 1988 la integración con el Banco de Vizcaya que dio origen al BBV.
Una vez se fusiona el BBV con el banco de origen público Argentaria, proceso que arranca a finales de 1999 y que culmina en febrero de 2001, Ybarra pasó a copresidir el grupo resultante junto a Francisco González (FG), que finalmente quedaría como único presidente de la entidad hasta finales de 2018.
La dimisión del reputado banquero se produjo en el marco de escándalo de las 'cuentas secretas' del BBV en Jersey, que se saldó con la dimisión de buena parte del consejo del banco una vez que, a comienzos de 2001, FG puso en conocimiento del Banco de España que más de una decena de consejeros y directivos de la entidad tenían fondos por importe de algo más de 200 millones de euros depositados en paraísos fiscales, sin reflejo en los estados financieros del grupo. El caso se cobró la presidencia de Ybarra, pero acabó sin culpables para la Justicia, que anuló las sanciones interpuestas al BBVA.
En el año en el que el banquero vasco abandonó la presidencia de la entidad, en 2001, el BBVA se disputaba con el Santander Central Hispano ser el mayor banco por capitalización bursátil de España, balanza que en los últimos años se ha decantado de forma clara para el grupo que hoy preside Ana Botín, cuyo valor de mercado actual es de unos 68.000 millones de euros, frente a los 33.000 millones de la entidad azul.
El 25 de noviembre de 2005, Ybarra fue condenado por la Audiencia Nacional a seis meses de prisión y una multa de 27.000 euros por apropiación indebida. Aunque no ingresó en prisión por la levedad de la pena y por no tener antecedentes penales, presentó un recurso ante el Tribunal Supremo, que le absolvió en noviembre de 2006 al entender que tenía poderes otorgados por el Consejo de Administración del BBVA para constituir fondos de pensiones.
La Audiencia Nacional también decidió ratificar el 11 de mayo de 2007 el archivo del caso de las "cuentas secretas", presuntamente ocultas en paraísos fiscales. Con anterioridad había estado imputado en algunos procesos judiciales relacionados con el BBVA y el caso Filesa, aunque finalmente fue absuelto
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