Alsa ha anunciado un nuevo servicio de traslado de pasajeros en Madrid y con ello ha enfadado aún más a los taxistas, que libran una guerra sin cuartel contra las VTC. Así, la Federación Española del Taxi, Fedetaxi, ha denunciado a la compañía de autobuses por impulsar AlsaCab un servicio para traslados de coche compartido dentro del anillo de la M-30 con origen o destino en una estación de autobuses de largo recorrido.
El servicio supone compartir un coche con venta de billete por plazas para realizar la última milla al autobús de una línea de transporte de viajeros. Según recuerda Fedetaxi, la venta por plaza en vehículos de menos de 9 pasajeros está prohibida a nivel estatal y también en la Comunidad de Madrid.
No obstante, la agrupación ha sido recientemente la impulsora de una reforma reglamentaria a la que la propia presidenta regional, Cristina Cifuentes, se comprometió para esta legislatura a fin de que se permita compartir taxis y el coste del trayecto para realizar traslados de ámbito urbano, bajo el sistema denominado carpooling.
Fedetaxi considera que si bien el servicio AlsaCab aún no está amparado por esa norma, tampoco quedará amparado mientras se realice con VTCs en lugar de taxis. Cada viaje constituye una infracción de la normativa de transporte que impide a los turismos el cobro por plaza individual o asiento que está sancionado con más de 1.000 euros a la empresa y que también podría suponer multas entre 200 y 400 para los usuarios que sean detectados participando en este tipo de servicios.
Fedetaxi, a través de su asociación miembro, Asociación Gremial de Auto-Taxi de Madrid, también se pondrá en contacto con el Ayuntamiento de Madrid para requerir del mismo modo que utilice los medios disciplinarios y de control a su alcance para evitar la transgresión de la ley por parte de la multinacional holandesa Alsa.
“Alsa no puede tener derecho de pernada alguno y debe respetar la normativa vigente y esperar como cualquier otra empresa a que se legalicen los servicios de taxi compartido”, señala Miguel Ángel Leal, presidente de Fedetaxi, quien también advierte que “no es de recibo que la movilidad se esté convirtiendo en una selva en la que las multinacionales estén ofertando servicios no amparados por la ley, intentando desbordar a los cuerpos de inspectores de la Comunidad de Madrid”. De este modo, “si nadie respeta las leyes, no podrán reprochar que los taxistas tomemos medidas de índole particular”, se mostró tajante.
La organización representativa de los taxistas españoles ha recordado en su denuncia que la regulación estatal de las VTC impide que se puedan prestar servicios de venta por plazas, y no existe ningún proyecto de norma en otro sentido.
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