A 300 metros del búnker familiar de Florentino Pérez en Madrid, situado en el madrileño barrio de El Viso, su mano derecha, el ejecutivo asturiano Marcelino Fernández Verdes (Oviedo, 1955), tiene otra mansión. Sin embargo, la vivienda del hombre que hasta hoy tiene el título de ejecutivo mejor pagado entre las cotizadas españolas, por delante del consejero delegado de CIE Automotive, Jesús María Herrera, y del CEO de Inditex, Pablo Isla, no sirve de escenario de ningún encuentro. Ni de ocio ni de negocios. Y eso que la casa de Aznar Jr. también le pilla a un paso.
En la calle Carbonero y Sol se erige un inmueble unifamiliar con sabor decimonónico. Se trata de un hotelito de la primitiva colonia Residencia del Parque Urbanizado, creado por los promotores Rafael Bergamín Gutiérrez y Luis Blanco-Soler Pérez en 1931 y que es el germen de la actual colonia de El Viso. La propiedad de Fernández Verdes tiene 907 metros y un pequeño jardín circundante, dos pisos de construcción ochentera y una fachada de ladrillo, el mismo que cierra ahora las oquedades de las ventanas.
La finca, que colinda con la Fundación Ramón Areces, podría ser una más de la colonia, pero destaca por su estado de abandono. La propiedad fue adquirida por el ejecutivo delfín del presidente del Real Madrid en 2012.
Marcelino Fernández Verdes la adquirió en el 2012 y desde entonces, libre de cargas, mantiene su letargo. Y liquidez no le falta para acometer la reforma. El delfín de Florentino Pérez en ACS se embolsó una retribución de 20,46 millones de euros en 2017, cuando simultaneó cargos ejecutivos en el conglomerado español y en sus filiales cotizadas Hochtief y Cimic. Este ejercicio las cosas no le han ido peor y amenaza con seguir siendo el ejecutivo mejor pagado del IBEX.
Sin embargo, poco o casi nada se sabe de este hombre que pasa por otros ránking de puntillas. Hay que ir a la prensa local para encontrar un perfil. El diario 'Hoy' relata que de niño sobresalió en los Dominicos con el mejor expediente de su promoción. Luego se licenció en Ingeniería de Caminos en la Universidad de Barcelona. Allí conoció a Marta Puiggros Asensio, estudiante de Psicología y ATS.
Se casaron, tuvieron cuatro hijos: Marta, Clara, Marcelino, Gloria. Se incorporó a ACS en 1987, cuando llevaba tres años trabajando en el sector. Florentino Pérez absorbió la empresa que le dio su primer empleo y se quedó prendado de aquel ingeniero "inteligente, reflexivo, que busca la perfección. El número 1". Lo definía así en 2010, cuando el alcalde de Oviedo lo nombró hijo predilecto.
De Candás a Menorca
Hoy reparte su vida entre Madrid, Australia y Alemania, pero sigue teniendo un fuerte patrimonio inmobiliario en España, donde luce las propiedades a su nombre sin empresa ni entidad 'offshore' mediante. Tiene casas en Oviedo, Candás y Ribadesella, donde el agosto es sagrado. Durante el año (y cuando puede) se escapa a ver a sus hermanas. En verano nada una hora al día, juega al golf y reparte su ocio con familia y amigos. También tiene casa en la Ciutadella de Menorca y, como Florentino, es un gran amante de las aguas baleares.
Del mismo modo, posee una propiedad en La Finca, en Pozuelo de Alarcón, y un inmueble en Salardu, la capital del municipio del Alto Arán situado en Lérida. Marce, como le llaman sus íntimos, es muy aficionado al senderismo y la montaña y cada año hace un gran viaje de aventura con sus hijos. Con su mujer tiene también en gananciales un gran piso en plaza de Castilla, cerca de la llamada colonia de los vascos, en una zona circundada por embajadas y unifamiliares.
Esta última propiedad, como todas las que tiene a su nombre, no tienen ninguna hipoteca ni carga que las grave. Tal vez por este fuerte (y saneado) patrimonio en España y su liquidez creciente llame la atención que el inmueble de El Viso de la mano derecha de Florentino Pérez siga desde 2012 sin grúas a la vista.
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