Un 10% en el segundo trimestre

El freno al robo de clientes calma a las telecos antes del duro otoño por el IPC

Las grandes operadoras se benefician de caídas de dos dígitos en las portabilidades durante los últimos trimestres, pese a la agresividad comercial mantenida en el segmento de bajo coste.

Un teléfono móvil.
Las portabilidades se han enfriado en los últimos trimestres.
Pixabay.

Un cierto respiro pese a la agresividad comercial en el 'low cost'. Las grandes operadoras de telecomunicaciones respiran con algo de alivio ante el claro enfriamiento del mercado reflejado en una reducción relevante en los robos de clientes entre competidores. Esta cifra se ha rebajado en tasas de doble dígito en los tres últimos trimestres. La reducción se produce justo antes del arranque de un nuevo curso, con la pelea por el fútbol entre Movistar, Orange y Dazn en ciernes, y un otoño que se presenta especialmente delicado ante la elevada inflación y el cuadro macroeconómico.

La resaca del primer impacto de la pandemia del coronavirus dejó una histórica cifra de cambios de operador móvil: 758.000 portabilidades móviles en el mes de octubre de 2020. La batalla por el bajo coste y los cambios vinculados a la temporada de fútbol fueron los principales causantes de este fuerte crecimiento. El de las telecos es un sector especialmente competido, donde es habitual una movilidad alta. Pero esos niveles eran preocupantes. Hicieron saltar las alarmas entre las grandes operadoras, pues esas cifras implican tasas de abandono muy elevadas, lo que a la postre acaba por incrementar sensiblemente costes para captar nuevas cuentas con las que compensar todas esas salidas.

Poco a poco la temperatura se ha ido enfriando. La última cifra oficial aportada por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia habla por sí sóla: 477.000 cambios en abril de este año. Esto supone un descenso del 37% respecto a ese pico de 2020. Esta caída se ha mantenido también, según confirman fuentes del sector, durante el mes de mayo y junio. En el conjunto del trimestre el descenso respecto al año anterior es de algo más del 10%. Sigue siendo una caída de doble dígito. Es bienvenida por el sector, especialmente por los grandes grupos 

La tasa de reducción de esas portabilidades móviles se ha ido recortando lógicamente, pues existe un cierto 'suelo' en un sector tan competido como este. Pero el hecho de mantener durante varios trimestres consecutivos estas rebajas de dos dígitos calma a los 'cuarteles generales' de los principales grupos, que sufren más esa infidelidad frente a las empresas más retadoras del sector como Digi o Avatel. Fuentes del sector consultadas hablan de un enfriamiento relevante en el segmento de más valor, donde las ofertas más agresivas han ido perdiendo peso. A esto hay que sumar también algo: la 'comoditización' de los gigas de datos en las líneas móviles y de ciertas características en los paquetes con precios muy ajustados tras años de guerra comercial. Con esos mimbres, mover a clientes es algo más complicado.

La estrategia multimarca de las grandes operadoras ha permitido acotar la agresividad comercial a ese bajo coste. Ahí sí que se han mantenido con dureza ciertos descuentos. También es cierto que algunos de los operadores  'desafiadores' empiezan a tener algo menos de margen de maniobra. El caso de Digi es el más significativo. En una estrategia de mantener los precios actuales, el fuerte crecimiento ha elevado sus costes operativos, principalmente por un mayor pago a Telefónica por el alquiler de sus redes. En un año ha pasado del 15,5% de margen Ebitda a un 14%.

Las principales compañías han mantenido con algo menos de presión en precios a las marcas principales. Los descuentos del 50% han desaparecido en la mayoría de los casos. Al menos en las ofertas públicas. Queda por ver cómo se reacciona durante el verano en la contratación del fútbol. Orange aún no ha enseñado sus cartas de las tarifas del próximo año. Sea como sea, los aspirantes como Digi o Avatel han vivido una ralentización de sus crecimientos en portabilidades, pues el río baja menos revuelto. 

Digi y Avatel, las dos grandes aspirantes, han reducido el incremento de las portabilidades en pleno enfriamiento

La rumana Digi ha pasado de 57.000 netas positivas (la diferencia entre las ganadas y las que han perdido) en marzo a unas 37.000 en junio. En los primeros diez días de junio suma en torno a 10.000, según apuntan fuente sdel sector, por lo que si se mantiene ese ritmo se quedará por debajo de esa última cifra. En el caso de Avatel, el considerado como 'sexto operador', la tendencia es más o menos similar. En marzo alcanzó las 25.000, mientras que el pasado mes de junio las situó entre 15.000 y 16.000. En lo que va de mes suma algo más de 4.000. 

Este enfriamiento se produce justo a las puertas de un otoño que se espera duro para el consumidor y las familias. Con el IPC en niveles históricamente altos, todo apunta a que serán meses complicados en lo macroeconómico. Y el margen de las operadoras para subir precios es limitado precisamente por la fuerte rivalidad. La agencia de calificación crediticia Moody´s apuntaba esta misma semana que la capacidad de maniobra de los competidores en mercados como el español o el italiano es muy limitada. Por ahora, ninguno ha movido ficha.

La fusión de Orange y Másmóvil podría reducir el frenesí competitivo. Aunque desde ambas compañías defienden que se trata más de un movimiento para buscar escala con la que invertir más y contar con más capacidad financiera, podría tener su efecto en el mercado residencial. Pero este no llegaría al menos hasta mediados del año que viene, cuando se haya cerrado definitivamente tras la potencial autorización de la Comisión Europea en Bruselas. Pero mientras eso sucede o no, este enfriamiento calma a las compañías.

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