En un país donde más del 24% del mercado está en manos de una compañía (en este caso, Mercadona) dar el salto más allá del territorio conocido no es una misión sencilla. La cadena de supermercados gallega Froiz se atrevió a hacerlo. En 2009, en pleno declive del consumo, abrió su primer local en la Comunidad de Madrid, en Torrejón de la Calzada.
Hace sólo unos meses, en la primavera de 2017, inauguró el cuarto, en la localidad de Fuenlabrada. Tras este movimiento, ha pisado el freno y, al menos de momento, no tiene entre sus plantes abrir más locales en esta región, según indican fuentes del sector. Tampoco, por tanto, en la capital, donde sólo cuenta con un supermercado, en la calle General Moscardó, junto a Nuevos Ministerios. La cadena gallega no ha aclarado a lainformacion.com cuál es su estrategia en la Comunidad de Madrid.
Froiz es un ejemplo claro de cómo se estructura el sector de los supermercados en España, donde, salvo la empresa de Juan Roig, los operadores locales tienen complicado dar el salto más allá de su zona de influencia. Por eso, comparados con los números que logra el gigante de los supermercados valenciano, el volumen de Froiz es significativamente más modesto.
La cadena gallega, sólo con su división de supermercados, ingresó en 2016 más de 537,7 millones de euros. Es el último año con datos publicados. El consolidado del grupo (que suma, entre otros, su filial en Portugal o los negocios específicos de congelados o de frutas y verduras), elevó ese volumen de ingresos hasta los 617 millones de euros, según las memorias publicadas en el Registro Mercantil. Una cifra que queda lejos de los 19.800 millones que facturó ese mismo año Mercadona.
La rentabilidad de la cadena fundada y presidida por Magín Alfredo Froiz también es más modesta, aunque se disparó en ese ejercicio. En 2016, la empresa de supermercados familiar elevó su beneficio casi un 52%, hasta situarlo en 7,6 millones de euros. Mercadona ganó 636 millones.
Froiz es una empresa relativamente joven, porque nació en 1968. Y su modelo de negocio, como el de la mayoría de cadenas de distribución regionales que operan en España (Ahorra Más o Bonpreu, por ejemplo) se basa en el comercio de barrio. Unos 'súper' regionales que copan el 11,4% del mercado, según Kantar, con un repunte en el último año del 0,3%.
En este caso, Froiz suma cerca de 230 locales, con una superficie media de unos 1.200 metros cuadrados. Eso sí, el perímetro consolidado del grupo es más grande, porque también opera en el segmento de los hipermercados, con seis locales; y en el de los grandes volúmenes, el conocido como 'cash & carry'.
La Comunidad de Madrid no ha sido el único mercado objetivo de la compañía fundada en Pontevedra. En conjunto, Froiz suma 28 locales en Castilla y León, otro más en Castilla-La Mancha; 14 en Portugal y 197 en Galicia, su buque insignia. Una red en la que emplea a casi 4.900 personas, según su última memoria consolidada.
Ese mismo informe anual también indica que su deuda, al cierre del ejercicio 2016, se situaba en los 194,6 millones de euros, incluidos proveedores y entidades de crédito. El grueso, 173,4 millones, con vencimiento en el recién concluido 2017. Un año en el que esperaba consolidar la cifra de negocio y el beneficio del ejercicio previo.
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