La fortuna acumulada de Sam Bankman-Fried, fundador de la plataforma de criptomonedas FTX, se ha visto desvanecida tras el colapso de FTX, que en tan solo unos días se ha llevado por delante el capital de una de las figuras más conocidas del sector y cuyo patrimonio llegó a estimarse en 26.000 millones de dólares. El índice de multimillonarios de Bloomberg, que calcula en tiempo real el dinero que tienen los más ricos del mundo, atribuía a Bankman-Fried una cantidad de casi 16.000 millones de dólares al inicio de la semana. Este viernes, la cifra es de cero.
El negocio estadounidense de FTX -que este viernes se ha declarado en bancarrota y del que el fundador controlaba un 70%- estaba valorado en 1 dólar, según ha indicado la agencia. Mientras que la millonaria participación que el empresario tenía en la empresa Robinhood se eliminaba de su patrimonio tras el anuncio de que la tenía a través de su firma de inversión Alameda Research.
Alameda está incluida en el proceso de quiebra que ha comenzado hoy y se cree que Bankman-Fried ha podido usar sus acciones de Robinhood para respaldar préstamos que ahora no puede pagar. En los documentos para solicitar la protección por bancarrota, FTX y Alameda han dicho que tienen más de 100.000 acreedores, con un pasivo de entre 10.000 y 50.000 millones de dólares, mientras que señalan que sus activos están en esa misma franja.
La desaparición de la fortuna del empresario de 30 años es una de las más espectaculares de la historia, aunque Bloomberg admite que Bankman-Fried aún puede tener activos que no se recogen en su índice. En los últimos años, se había convertido en una de las figuras más conocidas del sector y había aparecido en portadas de numerosos medios económicos como uno de los grandes rostros del mundo de las criptomonedas.
En paralelo a la declaración de bancarrota, FTX ha anunciado que Bankman-Fried ha dimitido como consejero delegado, aunque ha dicho que trabajaría para apoyar la transición en la empresa. FTX llegó a estar valorada en 32.000 millones de dólares y en los últimos días se vino abajo por falta de liquidez y con los usuarios apresurándose a retirar sus fondos. Finalmente, Bankman-Fried ha pedido disculpas y ha admitido que cometió errores a la hora de calcular los niveles de liquidez que eran necesarios, así como a la hora de dar explicaciones sobre la situación de la plataforma una vez que se desató la crisis.
Mientras tanto, han ido saliendo a la luz numerosos detalles sobre el funcionamiento de la plataforma, entre ellos el hecho de que FTX usó miles de millones de dólares depositados por sus clientes para financiar arriesgadas inversiones. FTX, según ha declarado una fuente a The Wall Street Journal, prestó el dinero a su firma de inversiones, Alameda Research, que lo usó en agresivas operaciones y que ahora debe a la plataforma unos 10.000 millones de dólares.
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