Fusión Mediaset: Berlusconi y Bolloré se verán las caras en los tribunales en enero

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Dicho y hecho. Vincent Bolloré, el segundo mayor accionista de Mediaset, con más de un tercio del capital, ha desatado la guerra judicial contra la familia Berlusconi por el proyecto de fusión de Media For Europe, dueño de Mediaset Spa y la filial española dueña de Telecinco y Cuatro. La empresa audiovisual francesa Vivendi, controlada por el multimillonario galo, empezó acciones legales en Italia para impugnar la Junta de Accionistas de Mediaset Italia del pasado septiembre, en la que se aprobó la fusión de su negocio en España. Se verán las caras en los juzgados a partir del próximo 10 de enero.

Mediaset Italia y España aprobaron el 4 de septiembre su fusión para crear el conglomerado audiovisual MediaForEurope en dos Juntas extraordinarias en Madrid y Milán, a pesar de la fuerte oposición de la empresa francesa Vivendi, accionista de la compañía, que en su demanda exige a la vía judicial no solo impugna la fusión sino que "declare la ilegalidad de la conducta de Mediaset y Fininvest".

Tras impugnar la junta en España, ahora Vivendi lo ha hecho en Italia y la primera audiencia del procedimiento tendrá lugar en el Tribunal de Milán (norte) el 10 de enero, según un hecho relevante de la Comisión Nacional del Mercado de Valores española. El grupo francés pedirá una indemnización multimillonaria a sus rivales italianos. En el escrito al juez solicita que se "condene a Mediaset y Fininvest, de conformidad con el artículo 278 de la Ley de Enjuiciamiento Civil italiana, a indemnizar a Vivendi por los daños sufridos y por sufrir, así como por los daños causados a la rentabilidad y al valor de la participación en Mediaset".

El proyecto de fusión de Mediaset Italia y España se presentó para crear un gigante audiovisual en Europa capaz de competir con otros actores del continente y plantar cara a titanes como la plataforma estadounidense Netflix. Finalmente se aprobó en una junta extraordinaria pese a la fuerte oposición de Vivendi, que mantiene un duro pulso con la familia Berlusconi dentro de la compañía y prometió impugnar los acuerdos.

En la nueva empresa, los actuales accionistas de las dos partes dispondrán de acciones especiales que les permitirán ejercer un poder reforzado, medida que beneficia sobre todo a la familia Berlusconi y diluye el peso de Vivendi, que tiene el 28,8% del capital pero algo menos del 10 % de los derechos de voto.

Unos derechos que además no puede ejercer en las juntas de Mediaset desde que el grupo de Berlusconi lo vetó al considerar su comportamiento desleal, pues en 2016 se retiró de un acuerdo de compra del canal privado Mediaset Premium.

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